MAS RAPIDO QUE UNA TORTURA
MAS FUERTE QUE UN RATON
MAS NOBLE QUE UNA LECHUGA
SU ESCUDO ES UN CORAZON
ES EL CHAPULIN COLORADO
Fanfic basado en la obra del supercomediante Chespirito
Con los personajes de Konosuba.
En esta ocacion presentamos el capitulo piloto de esta aventura del Chapulin en Belerz
Todo inicia en el mundo de Konosuba cuando Megumin y Yunyun estaban a punto de morir por el demonio Hush que todo lo que les pedia era un simple gato con alas, pero Megumin se aferaba a la gata Chomosuke con el amor de una madre. En su desesperacion dice ¿Y ahora quien podra defenderme?
De repente aparecio el Chapulim colorado diciendo YO
Tanto las demonio carmesi como Hush se quedaron calladas
Yunyun preguntaria ¿Eres un aventurero?
El chapulin extrañado de que no lo reconocieran diria ¿Aventurero ?¿Que no me conoces niña? Soy el Chapulin colorado
Megumin : El Chapulin colorado ¿Eres algun fanatico de los demonios carmesi?
El Chapulin contestaria, tienen suerte que hable los distintos lenguajes del sistema solar de la via lactea y de este tambien
Yunyun ¿El sistema que?
El Demonio Hush se desesperaria por tanto sujeto con nombre raro
Yunyun: Chapolin colorado, necesitamos ayuda Este
El chapulin les interumpiria para decir: Demonio les esta atacando ya lo se
La mirada del Chapulin cambiaria rapidamente al vere la altura de Hust
abriria los ojos a mas no poder y lentamente cambiaria su expresion a miedo
Con permiso
diria
Hust- si, ahora largate, ya tube un largo dia
El chapulin rapidamente miraria su chipote chillon y hagarando fuerzas diria
Esperarte un momento
se arrodillaria, cerraria los ojos, se santiguaria y rezaria en una oracion que hasta para los seres que habitan en la tierra lo reconocerian
y diria que lo unico que necesita para derrotar al demonio seria su fe en Cristo
Entonces terminaria de santiguarse y daria a chipotasos al dominio hasta dejarlo tieso sin ninguna explicacion le habia dado
Megumin y Yunyun quedarian sorprendidos de la facilidad con la que el Chapulin vencio al demonio
Seguido de eso El chapulin se retiraria diciendo su tipica frase, No contaban con mi astucia
Yunyun preguntaria como lo hizo: El chapulin diria con fe en el, señalando al cielo. todo se puede
Yunyun no terminaria de entender
El chapulin diria que ademas tiene un primo que se ha enfrentando al diablo en el monte y le ha ganado
se alejarian un rato y para asegurarse de que no vuelva
Megumin hace explocion y mata a Hush
El chapulin voltea y dice CHANFLE, mi primo nunca me dijo que explotaran
bueno, ya que el demonio exploto, yo no tengo nada que hacer aqui
El chapulin veria a megumin desmayada
Niña contestame en vez de poner esa cara de perrito deslumbrado en el periferico
no me oyes
Yunyun diria, espere valiente aventurero, Mi amiga se quedo sin energia y no puede mover ni un musculo
lo sospeche desde un principio
Esta niña necesita mas cuidados ¿Habra un hospital cercano?
Megumin usando sus pocas fuerzas para mover sus musculos de la cara diria ¿A quien le dices niña?
Yunyun cargaria a Megumin y el chapulin le diria: Dejalo, mejor lo hago yo
Entrarian a un gremio de aventureros y el chapulin preguntaria por un doctor
Yunyun le diria que no es necesario, que estara bien, solo deben recuperar su energias
Tomarian aciento
El chapulin preguntaria porque se estaban enfrentando a un demonio?
Primero que nada, Megumin quiere saber quien es el.
El chapulin se presentaria denuevo como el chapulin colorado, protector de un planeta en la via lactea llamado tierra
Que es un planeta? diria yunyun
eñl chapulin diria que su civilizacion es muy temprana para entenderlo, pero no se preocupen, dentro de poco una organizacion vendra a visitarlos y entonces tendran: carreteras, cuidades, tegnologia, naves espaciales , guerras interplatanarias
esos asustaria a las magas carmesis que no se alejaban porque Megumin aun no se recuperaba
El chapulin diria que para terminos simples que su civilizacion pueda entender es un superheroe que viaja por la existencia ayudando a gente que pueda ayudar y que conoscan su llamado, asi que bien ¿Cual es su situacion? el que a dos amos sirve amanece mas temprano
Megumin duraria un poco, pareceria como un demonio al que invocaron por accidente, pero viendo que se enfrento a hush sin mas que su martillo y su fe en su religion, una religion que nunca habia oido decide contarle que en este pais, El puedo es saqueado por los sirvientes de una mala persona llamada "El rey demonio" Los humanos han hecho lo posible para vivir en sociedad, pero cosas como las que vio es el pan de cada dia y los aventureros se preparan en cuidades como esta Axel, para enfrentar amenzasa y cumplir misiones en favor de la comunidad
chanfle, chanfle, rechanfle
Eso conmoveria al chapulin que veria que seria todo un pueblo que defender, su trabajo no ha acabado todavia, aunque seria un trabajo largo, se aprovechan de su nobleza sin duda.
Megumin diria a yunyun que se acerque ¿No te parece que este tipo es muy raro?
Megumin ¿Crees que se burle de nosotras o esta loco?
Yunyun, podria ser, pero si puede vencer a amenzas como hush es mejor tenerlo de nuestro lado
Yunyun, bueno, creo que si vas a defender a este pueblo, podrias empezar por volverte aventurero, el registro es ahi en el gremio, puedo prestarte dinero para que te hagan tu targeta de estadisticas
es esactamente lo que iba a decir
El chapulin sacaria su targeta, saliendo estadisticas bastante disparajes, en inteligencia es bastante baja, pero sus habilidades de manuales, suerte y condicion fisica son arriba del promedio, Tendria la clase de Herrero oscuro, Con lo cual al subir de nivel adquiria la habilidad de contruir armas y mejorar armas, aunque no sean algo que se lleven con el chapulin
Para pagarle a yunyun y de paso que las niñas recien llegadas ganen algo de dinero se irian a casar sapos, lo que el chapulin pensaba seria maltrato animal con resoreteras, su cara cambio al ver el tamaño de los sapos, El chapulin empezaria a correr, megumin diria que los mantengan ocupados para que pueda explotarlos,
recordando el chapulin mientras corre que megumin queda como las vicitmas de la chichara paralisadora se le ocurre una idea, saca su chichara y paralisa al sapo
NO CONTABAN CON MI ASTUCIA
Yunyun dice wow, pero viendo que viene otro sapo hace rapido el corte de luz matando al sapo paralisado.
El chapulin diria La curiosidad mató al calzón.
El otro sapo estaria detras de yunyun y la atraparia con su lengua
USA la trompeta
El chapulin con algo de miedo diria, si lo hago si lo hago si lo hago, sacaria una pastilla de chiquitolina y le daria al sapo haciendo que se encoja y sea detrozado por yunyun que aun estaba en su interior
el sapo manifesto que no ha podido que le den ninguna pedrada
Yunyun haria señales para que megumin cancele la explocion, pero muy tarde, megumin hizo explocion y eso atrajo mas sapos
Regresaron al gremio con un monton de sapos pequeños muertos al gremio y la recepcionista luna pregunto que que hacian
Yunyun medio traumada con el chapulin cargando a megumin, todos bañados en sangre y fluidos de sapo diria
le dimos las pastallas al sapos, se encojieron y se mueriron
la recepcionista no entenderia media palabra de yunyun pero le diria que al ser sapos pequeños,son de otra raza y no valen nada, aunque su carne tampoco sea suficiente para el restaurante y..
los sapos crecen y tienen practicamente medio pantano de sapos en la puerta del gremio tapando la entrada.
suena la cancion del chavo
MAS FUERTE QUE UN RATON
MAS NOBLE QUE UNA LECHUGA
SU ESCUDO ES UN CORAZON
ES EL CHAPULIN COLORADO
Fanfic basado en la obra del supercomediante Chespirito
Con los personajes de Konosuba.
Edicion: Bibliopelicomic
En esta ocacion presentamos un episodio titulado: Una bendicion para este espadachin tramposo.
Kyoya desarmado diria: oh ¿Y ahora quien podra defenderme?
EL CHAPULIN COLORADO
No contaban con mi astucia
Que bueno que llegaste chapulin colorado
Silencio, mis antenitas de Vilin estan detectado algo
Mirando el chapulin arriba a un jinete sin cabeza montando un caballo decapitado
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MAS RAPIDO QUE UNA TORTURA
MAS FUERTE QUE UN RATON
MAS NOBLE QUE UNA LECHUGA
SU ESCUDO ES UN CORAZON
ES EL CHAPULIN COLORADO
Fanfic basado en la obra del supercomediante Chespirito
Con los personajes de Konosuba.
Edicion: Bibliopelicomic
En esta ocacion presentamos un episodio titulado:
OH, Y AHORA QUIEN PODRA DEFENDERME?
YO,
EL CHAPULIN COLORADO
No contaban con mi astucia,
siganme los buenos
Que bueno que llegaste chapulin colorado
Silencio, mis antenitas de Vilin estan detectado algo
puede dar golpes con sonido
Se aprovechan de mi nobleza
Torpè
usar las antenitas de bilin
lo sospeche desde un principio
mas vale andar solo que invitado
Yo no me... me lo imagine que es diferente
En primer lugar no me asuste y en segundo lugar, me asuste porque me agararon desprevenido
YA LO HAGO, YA LO HAGO, YA LO HAGO
todos sus movimientos estan friamente calculados
500 errores los comete cualquiera
El Chavo, Quico y Don Ramon en Konosuba
El Chavo y Quico estaban jugando en la calle cuando de repente, un auto apareció de la nada y los atropelló. sus almas fueron llevadas al más allá donde Aqua de Konosuba los recibió.El Chavo se despertó en un lugar extraño, rodeado de niebla y sin entender lo que estaba sucediendo. De repente, apareció una joven mujer con cabello azul, quien se presentó como Aqua, la diosa encargada de guiar a las almas al más allá de los que tuvieron vidas truncas.
"¡Bienvenido Rodolfo!, te doy la bienvenida al mas alla, Lamento mucho lo que les ha pasado, por desgracia acabas de fallecer , dijo Aqua mientras traia unas papitas
Aqua le explicó al Chavo que había muerto en el accidente y que estaba en el más allá, un lugar donde las almas van después de morir. El Chavo se sintió asustado y triste, no sabía cómo iba a volver a la vida y cómo se sentiría Don Ramón sin él.
Aqua intentó consolarlo, explicándole que había hecho muchas cosas buenas durante su vida y que estaría en un lugar mejor. Sin embargo, le dijo que no podía regresar a la vida ya que solo podía ayudar a una persona a la vez y estaba atendiendo a otros fallecidos en ese momento.
Aqua le preguntó al Chavo si quería quedarse en el más allá y vivir una vida feliz y sin preocupaciones. Aunque en el cielo no es tan maravilloso en el sentido que sin un cuerpo fisico no se puede jugar, disfrutar de una buena torta de jamon, no hay videouegos, solo es un alma Pero el Chavo, aunque estaba triste por lo que había sucedido, decidió que quería volver a la vida y estar con sus amigos y su familia.
Aqua le explicó que no podía hacer nada al respecto, pero que estaría allí para él si necesitaba hablar o necesitaba ayuda. Le dijo que Don Ramón estaba muy triste por lo que había sucedido y que necesitaba apoyo. Con estas palabras, Aqua desapareció, dejando al Chavo solo en el más allá, esperando su turno para volver a la vida.
Aqua, al ver al Chavo triste y desorientado, decide ofrecerle dos opciones: ir al cielo o reencarnar en un mundo de fantasía. Claro que ella no le mencionó que se trataba del mundo donde todo es letal y peligroso, ya que sabía que podría ser un lugar peligroso para alguien como El Chavo, le podria dar miedo y no aceptaria. a Si Dice - Te propondre un trato, hay un mundo que podria perder su paz en la mano de un tirano autonombrado "El Rey demonio", debido a que poca gente nace ahi, se esta reduciendo la poblacion renestan enviando gente que ah muerto en otros undos para regular la poblacion.
Aqua le explico que como serie injusto enviar a un nino mexicano asi nada mas, Por lo que les insertaran el lenguaje local del lugar en la cabeza y le permitira ir con un objeto presioso o una habilidad valiosa, a lo que el Chavo pensando en los libros de aventura como Don Quijote de la mancha que les contaba el profesor Jirfales aceptaria con un "Sale y Vale, y que reencarnaba y seleccionaba un arma y vencia al rey demoni y sas"
"¿Qué es lo que quiere llevar contigo al más allá?" preguntó Aqua al Chavo.
"Quiero llevarme una torta de jamón," respondió El Chavo con una sonrisa.
Aqua, algo sorprendida, le dio la torta de jamón, pero le dijo que podría llevar algo mejor. El Chavo se puso a pensar, pero no se le ocurría nada más que pudiera ser mejor que su torta de jamón.
De repente, se le vino a la mente el chipote chillón del Chapulín Colorado, su héroe favorito. "¡Quiero llevarme el chipote chillón del Chapulín Colorado!" exclamó emocionado.
Aqua, un poco confundida, le entregó el objeto al Chavo, sin saber lo que era en realidad. Pero aclarandole que es una copia hecha por ella con los mismos poderes que el Chipote de su legitimo super - heroe "Bueno, creo que eso será suficiente," dijo ella con una sonrisa.
El Chavo, feliz con su torta de jamón y su chipote chillón, se preparó para su viaje al más allá. Sin embargo, lo que no sabía era que en realidad se estaba preparando para ser reencarnado en el peligroso mundo de Konosuba, donde tendría que luchar contra monstruos y criaturas mágicas para sobrevivir.
Pero eso es una historia para otro día. Por ahora, El Chavo estaba feliz con su torta de jamón y su chipote chillón, sin saber que lo esperaba un destino mucho más aventurado.
Después de haber llevado al Chavo al más allá, Aqua regresó a su asiento para recibir a Quico. Encontró a Quico
quien llegó a su presencia con la misma confusión que el Chavo había tenido al principio.
"¿Qué está pasando? ¿Por qué estoy aquí?" preguntó Quico, un poco asustado.
. Se acercó a él y le dijo: "Lo siento mucho, Quico, pero estás muerto."
Quico, sorprendido y asustado, no podía creer lo que estaba pasando. "¿Muerto? ¿Cómo es posible?" preguntó con una voz temblorosa.
Aqua le explicó que había sido atropellado por un auto mientras jugaba en la calle. También le dijo que el Profesor Jirafales, y su madre estaban sufriendo mucho por su muerte.
Quico, sin saber qué hacer, preguntó si había alguna forma de volver a la vida. Aqua le explicó que ella no tenía ese poder, que solo podía llevarlo al más allá o a un mundo de fantasía. Quico, al igual que El Chavo, decidió ir al mundo de fantasía.
Aqua le explicó que había muerto en un accidente y que estaba ahora en el más allá. También le dijo que su madre y el Profesor Girafales estaban muy tristes por su pérdida.
Quico, con lágrimas en los ojos, preguntó por El Chavo. "¿Por aquí pasó El Chavo?" preguntó preocupado.
Aqua le dijo que sí, que acababa de estar allí, pero que ya había partido. "Pero no te preocupes," le dijo Aqua. "El Chavo está bien. Él se ha ido a un lugar seguro y feliz."
Quico, todavía en shock por lo que estaba sucediendo, no sabía qué pensar. Pero al menos tenía la esperanza de que El Chavo estuviera bien. Con un nudo en la garganta, Quico se preparó para continuar su viaje en el más allá, sin saber que pronto se uniría a El Chavo en un mundo lleno de aventuras y peligros.
Aqua se preparó para ofrecer a Quico las mismas opciones que había ofrecido al Chavo. "Tienes dos opciones, Quico. Puedes ir al cielo, donde te esperan las puertas de la eternidad, o puedes ir a un mundo lleno de aventuras y magia, donde tendrás la oportunidad de tener un gran poder o un objeto poderoso a tu elección."
"¿Puedo llevarme algo conmigo?" preguntó Quico.
"Por supuesto," respondió Aqua, "puedes llevar lo que quieras."
Quico pensó por un momento y luego dijo: "Quiero llevarme mi balón de fútbol y mi trompeta."
Aqua sonrió y le entregó los objetos a Quico. "Muy bien, estás listo para partir," dijo ella.
Quico Dijo "No espere, como que mi balon de futbol no me va a servir mucho, Puede mostrarte otras ocunes"
Quico, emocionado por la idea de tener un gran poder mágico, preguntó con entusiasmo: "¿Qué se llevó El Chavo? ¡Yo quiero algo mejor que él!".
Aqua se quedó pensando por un momento, intentando recordar lo que El Chavo había pedido. "Bueno, El Chavo... Él pidió una torta de jamón", respondió Aqua.
Quico se sorprendió ante la respuesta. "¿Una torta de jamón? Eso es todo lo que pidió?".
"Sí, así es", respondió Aqua con una sonrisa en su rostro.
Quico se sintió un poco decepcionado, pero aún así estaba emocionado por la idea de tener un gran poder mágico. Tomó su decisión y eligió ir al mismo mundo que El Chavo, con la esperanza de tener la oportunidad de tener algo mucho mejor que una simple torta de jamón.
"¿Dos tortas de jamón? ¡Quico, por favor! ¿No puedes pensar en algo más útil o poderoso?", exclamó Aqua frustrada.
Quico se sintió un poco abatido por la reacción de Aqua. "Pues, no sé. Sólo quería algo delicioso para comer", respondió tímidamente.
Aqua suspiró y trató de pensar en una solución para satisfacer a Quico. "Mira, Quico. No puedes tener dos tortas de jamón, pero puedo darte una torta que se materializa cada vez que la necesites. ¿Qué te parece?".
Quico se emocionó ante la idea. "¡Wow! ¡Eso suena genial! Pero, ¿cómo funciona?".
Aqua sonrió y respondió: "Es muy fácil. Sólo tienes que decir 'Torta inmediata' y la torta aparecerá en tus manos".
Luego dijo 'Torta inmediata' 'Torta inmediata' 'Torta inmediata' 'Torta inmediata' 'Torta inmediata'
Quico, emocionado por su nueva adquisición, no pudo contenerse y empezó a decir torta inmediata tantas veces que inundo el lugar de tortas de jamon. Aqsi que Aqua le quito su poder "Torta inmediata, una torta. Media torta, un cuarto de torta. ¡Me doy!".
Aqua presentó una variedad de objetos mágicos ante Quico, en la esperanza de que eligiera algo que pudiera serle útil en el mundo de fantasía. "Mira, Quico. Tengo un espantasuegras, una trompeta, un embudo, un gorro mágico, y un paquete de confeti mágico. Cualquiera de estos objetos te será de gran ayuda en el mundo de fantasía", dijo Aqua. ¿Cuál de estos objetos te gustaría llevar contigo?".
Quico examinó los objetos con cuidado, y finalmente decidió tomar el espantasuegras.
Quico se mostró intrigado por los objetos, pero en su mente ya había decidido qué llevarse. "¿Qué tal si me llevo el espantasuegras?" preguntó Quico.
Aqua le advirtió que tenía que tener cuidado al usarlo, pero Quico ignoró la advertencia y lo activó. Sin embargo, el efecto del espantasuegras terminó volviéndose contra Aqua, quien terminó asustándose a sí misma. cuando lo agitó, en lugar de espantar a un enemigo imaginario, el sonido atronador del objeto terminó derrumbando a Aqua al suelo.
"¡Ay, Quico! ¿Qué diablos hiciste? No era para que lo uses de esa manera", se quejó Aqua mientras se levantaba del suelo.
Quico se disculpó apenado y luego tomó la trompeta. Pero cuando tocó una nota, Quico la sopló con todas sus fuerzas, pero el sonido terminó siendo tan estridente que Aqua terminó con dolor de cabeza.
"Muy bien, Quico. Ya es suficiente. ¿No puedes ser un poco más cuidadoso?", gritó Aqua mientras se tapaba los oidos.
El embudo, en lugar de funcionar como un objeto mágico, sólo sirvió para que Quico bebiera agua de él. Quico, ignorando las advertencias de Aqua, tomó el embudo y lo lanzó hacia ella. Pero, por suerte, Aqua logró esquivarlo a tiempo.
Finalmente, Quico tomó el gorro mágico y el paquete de confeti mágico. Pero cuando intentó ponerse el gorro, se encogió de tamaño,
Aqua ya estaba empezando a enojarse con Quico, pero trató de mantener la compostura. "Quico, ¿por qué no eliges algo más útil? ¿No ves cómo estos objetos sólo te están causando problemas?".
mientras que el confeti mágico resultó ser tan frágil que se deshizo en sus manos, en lugar de crear una fiesta mágica, sólo hizo un lío. Pero lo que enfureció a Aqua fue cuando Quico rompió el objeto más preciado que tenía: el confeti. "¡¿Cómo pudiste hacer eso?! ¡El confeti era mi objeto mágico favorito!", exclamó Aqua furiosa.
Aqua, enojada por el desprecio de Quico por los objetos mágicos que ella había preparado, tomó los objetos y se alejó furiosa, dejando a Quico atrás.,
Quico sólo pudo encogerse de hombros. "Lo siento, Aqua. No sabía que era tan importante para ti".
Desesperada por encontrar un objeto que Quico pudiera llevarse, Aqua preguntó con urgencia: "Bueno, ¿ya sabes qué quieres llevarte entonces?".
Quico sonrió maliciosamente y respondió: "Sí, algo mucho mejor que lo que se llevó el Chavo".
Aqua suspiró resignada, sabiendo que lo que venía no iba a ser bueno. "Bueno, ¿qué es lo que quieres llevarte entonces?".
Aqua Por ultimo le diria que el El Chavo se llevo el Chiote Chillon de El Chapulin colorado
"Aquí, ya sé lo que voy a llevar", dijo Quico triunfante. "Voy a llevar todas las armas del Chapulín Colorado".
Aqua sólo pudo suspirar, sabiendo que tendría que lidiar con un Quico impulsivo y peligroso en el mundo de fantasía.
Quico le tendió una serie de objetos de batalla del Chapulín Colorado, excluyendo el chipote chillón que ya había sido tomado por el Chavo. Aqua sólo pudo suspirar ante la elección de Quico, sabiendo que esto sólo podía llevar a problemas en el mundo de fantasía.
Quico se despidió de Aqua y se preparó para su viaje al mundo de fantasía. Sin embargo, al igual que El Chavo, no sabía lo que le esperaba en ese mundo lleno de peligros y aventuras. Por ahora, solo estaba feliz de tener su equipo del Chapulin Colorado
Quico, emocionado, corre hacia donde esta el Chavo para abrazarlo. Pero cuando lo encuentra, se da cuenta de que su amigo esta vestido con ropa extraña y lleva una extraña arma en la mano.
Quico: ¡Chavo, eres tú! ¡Qué alegría verte de nuevo! ¿Cómo estás?
Chavo: Hola, Quico. Estoy bien, gracias por preguntar. Pero, ¿qué haces aquí? ¿También muriste?
Quico: Sí, murí en un accidente mientras jugábamos. Pero aquí estoy ahora, en este extraño lugar. ¿Tú sabes dónde estamos?
Chavo: No sé exactamente, pero parece un mundo mágico. Y yo tengo una misión importante aquí, luchar contra monstruos y salvar a la gente.
Quico: ¿Qué? ¡No puedes hacer eso! Eres el Chavo, no un héroe.
Chavo: Lo sé, pero parece que no tengo elección. Y además, tengo estas armas geniales que me dio Aqua.
Quico: ¡¿Qué?! ¿Aqua te dio armas? Esa chica siempre mete la pata. Pero bueno, si vas a luchar, entonces yo también quiero ayudar.
Chavo: ¿En serio? ¡Qué chido, Quico! Pero, ¿qué vas a hacer?
Quico: Pues no tengo armas como tú, pero tengo algo mejor: mi inteligencia. Soy muy astuto y puedo pensar en estrategias.
Chavo: Jajaja, eso no es verdad. Pero, vamos a ser un gran equipo.
Quico: ¡Sí, equipo Quico al rescate!
Los dos amigos se dan un fuerte abrazo, listos para enfrentar las aventuras y peligros del mundo de fantasía.
El Chavo y Quico se encontraron en el mundo de fantasía y comenzaron a hablar de lo que habían experimentado. El Chavo mencionó cómo extrañaba a Don Ramón y Quico a Doña Florinda, mientras que Quico se quejaba de lo incómodo que era su traje de aventurero.
De repente, se dieron cuenta de que no entendían nada de lo que la gente decía a su alrededor. Miraron a su alrededor y se dieron cuenta de que estaban en un mundo completamente diferente, donde no conocían a nadie y no entendían el idioma.
Decidieron preguntarle a una anciana que estaba sentada cerca de ellos para que les explicara cómo llegar a un gremio de aventureros. La anciana comenzó a hablar en un idioma extraño y desconocido, pero de alguna manera el Chavo y Quico pudieron entenderla.
El Chavo y Quico intercambiaron una mirada confusa, pero decidieron seguir adelante con su búsqueda. No sabían exactamente en qué se habían metido, pero estaban decididos a explorar el mundo de fantasía y encontrar una manera de volver a casa.
El Chavo y Quico llegaron a la recepción del Gremio, donde se encontraron con un recepcionista bastante serio y estricto. El recepcionista les explicó que para ser aventureros debían pagar una cuota de 1000 monedas eris, lo cual era una cantidad enorme para ellos.
El Chavo, pensando en cómo obtener el dinero, comenzó a recordar todos los trabajos que había hecho antes, como vender churros o limpiar coches, pero Quico se negaba rotundamente a trabajar. En cambio, Quico decidió vender las pastillas de Chiquitolina que Aqua le había dado como parte del kit del Chapulin Colorado.
Los aventureros que estaban en la recepción del Gremio vieron las pastillas y se interesaron en ellas. Quico les explicó que las pastillas podían encoger a una persona o a cualquier otro ser vivo que deseen, lo que podría ser útil en ciertas misiones. Los aventureros estaban fascinados por las pastillas y las compraron de inmediato, a un eris la pildora lo que le dio a Quico suficiente dinero para pagar la cuota de registro.
Mientras tanto, el Chavo estaba tratando de encontrar un trabajo. Sin embargo, todos los trabajos que encontró eran demasiado difíciles o peligrosos para él. Finalmente, decidió pedir trabajo en el Gremio, pero el recepcionista le dijo que no había trabajo para alguien como él. Frustrado, el Chavo se sentó en un rincón a pensar en lo que podía hacer.
Quico regresó triunfante con el dinero para pagar la cuota de registro y le dijo al Chavo que ya tenía el dinero. El Chavo se emocionó y se preparó para registrarse, pero el recepcionista todavía lo rechazó. Desesperado, el Chavo le pidió ayuda a Quico, quien tuvo una idea brillante.
Quico convenció a los aventureros que habían comprado las pastillas de Chiquitolina para que ayudaran al Chavo a conseguir un trabajo. Los aventureros estuvieron de acuerdo y le dijeron al recepcionista que el Chavo era un gran trabajador y que lo contrataran. Finalmente, el recepcionista cedió y el Chavo consiguió un trabajo en el Gremio.
El Chavo y Quico se alegraron y se emocionaron al saber que podrían convertirse en aventureros. Sin embargo, aún no tenían idea de los problemas y desventuras que les esperaban en el mundo de Konosuba.
El Chavo y Quico se emocionan al tener en sus manos sus tarjetas de aventurero y se preparan para ver sus estadísticas. El Chavo es el primero en sacar su tarjeta y Luna comienza a leer en voz alta: "Fuerza baja, Salud media, Inteligencia baja, suerte alta su oficio sugerido es Ser Aventurero".
El Chavo está emocionado al escuchar que su oficio es ser aventurero y le dice a Quico que saque su tarjeta para ver qué oficio le sugieren. Quico saca su tarjeta y Luna lee en voz alta: "Fuerza baja, Salud alta, Inteligencia baja, suerte media, su oficio sugerido es Ser Aventurero también".
Quico se emociona y ambos se ponen sus tarjetas de aventurero. Empiezan a caminar por el gremio y ven a otros aventureros con habilidades y armas impresionantes. Se dan cuenta de que ellos son solo niños y no tienen habilidades especiales.
Luna, la recepcionista les ofrece la opción de ser comerciantes y vender objetos que recojan en sus aventuras, pero el Chavo y Quico deciden seguir como aventureros. Deciden ir a la tienda de armas y equipos de una tala "Wiz" para ver qué pueden comprar.
Allí ven una espada grande y una armadura pesada, pero obviamente no pueden comprar nada de eso. Luna les sugiere que vayan a una misión fácil para empezar, y ellos aceptan emocionados.
Salen del gremio con sus tarjetas de aventurero en mano y empiezan su nueva vida como aventureros en el mundo de fantasía.
El Chavo y Quico llegaron cansados a la posada después de ser rechazados de varios trabajos. Quico había gastado la mayoría del dinero que tenían en las pastillas de Chiquitolina y ahora eran los únicos recursos que les quedaban.
Al llegar a la recepción, el dueño de la posada, un hombre corpulento y de aspecto rudo, les preguntó si tenían suficiente dinero para pagar la habitación. Quico, nervioso, sacó el poco dinero que le quedaba de la venta de las pastillas y le dijo que era todo lo que tenían.
El dueño de la posada lo miró con desprecio y les dijo que no podían pagar una habitación con esa cantidad de dinero. Los niños se sintieron desanimados y pensaron que tendrían que pasar la noche en la calle.
Justo en ese momento, apareció una mujer la misma de la tienda de armas, vestida con ropa extravagante. Era una exaventurera de alto nivel y había escuchado la conversación de los niños con el dueño de la posada.
Ella se acercó a ellos y les preguntó si necesitaban ayuda. El Chavo y Quico se sorprendieron al verla y le explicaron su situación. La mujer les sonrió y les dijo que ella pagaría la habitación por esa noche y que podían quedarse con ella en su habitación.
Los niños se sintieron aliviados y agradecidos por la ayuda. Pasaron la noche en la habitación de la mujer, que resultó ser una persona muy amable y divertida. El Chavo y Quico se durmieron felices, sabiendo que aún hay buenas personas en el mundo.
Al dia sguiente El chavo y Quico se sientan a la mesa para desayunar en el gremio, y mientras comen, el chavo le pregunta a Quico cómo hizo para conseguir el dinero para la comida.
Quico le responde que vendió sus pastillas de Chiquitolina a los aventureros. El chavo se emociona y le pregunta si todavía tiene más pastillas para vender.
Quico le dice que sí, pero que tiene que guardar algunas para emergencias. El chavo le pide que le venda unas pocas para él también.
Después de terminar el desayuno, el chavo y Quico van a la recepción del gremio para buscar misiones que les permitan ganar dinero. La recepcionista, Luna, les informa que hay varias misiones disponibles, pero que la mayoría son para aventureros más experimentados.
El chavo y Quico insisten en tomar una misión, por lo que Luna les asigna una tarea para recoger algunos ingredientes raros de una cueva cercana. A cambio, les promete una pequeña recompensa en efectivo.
Los dos amigos se emocionan por su primera misión y deciden prepararse para la aventura. El chavo va a buscar provisiones mientras Quico empaca las herramientas necesarias.
Sin embargo, al llegar a la tienda, el chavo se distrae con los dulces y termina gastando todo el dinero que tenía en comida y golosinas. Cuando llega a la cueva, Quico se enoja con él por haber gastado el dinero y no poder comprar las herramientas que necesitaban.
A pesar de las dificultades, el chavo y Quico logran encontrar los ingredientes raros y regresan al gremio con éxito. Luna les da su recompensa y les sugiere que ahorren el dinero para su próxima misión.
El chavo y Quico deciden seguir trabajando como aventureros para ganar más dinero y poder comprar las herramientas que necesitan.
El chavo y Quico se emocionan al ver que la recompensa por cazar sapos gigantes es muy alta, así que deciden prepararse para la misión. Llegan al lugar donde se encuentran los sapos y se dan cuenta de que son enormes, midiendo al menos 3 metros de altura.
El chavo y Quico comienzan a asustarse al ver lo grandes que son los sapos y se preguntan cómo van a cazarlos con sus simples resorteras. Sin embargo, deciden intentarlo de todos modos.
Quico es el primero en atacar, pero su piedra apenas hace cosquillas en la piel de los sapos. Luego le toca el turno al chavo, quien lanza su resortera con todas sus fuerzas, pero la piedra apenas si hace una marca en la piel del sapo.
Los sapos gigantes comienzan a moverse, saltando hacia los niños y dejándolos asustados y confundidos. El chavo y Quico corren por su vida mientras los sapos los persiguen.
Finalmente, los sapos se cansan de perseguir a los niños y deciden dejarlos ir. El chavo y Quico regresan al gremio sin haber cazado ningún sapo gigante y sin haber ganado el dinero que esperaban.
Ambos se ríen de la situación y prometen no volver a subestimar las misiones que les son asignadas.
El Chavo y Quico deciden poner un anuncio en el tablón de anuncios del gremio, ofreciendo la oportunidad de unirse a su grupo de aventureros para cazar sapos gigantes. Esperan a que alguien responda al anuncio para que puedan hacer todo el trabajo mientras ellos simplemente observan.
a Quico jamas lse le ocurrio por la cabeza usar las pastillas de chiquitolina o el Chirin chirron El Chavo y Quico se dan cuenta de que necesitan tomarse en serio su trabajo como aventureros si quieren tener éxito y ganar dinero.
Megumin, una archimaga del clan de los magos carmesis llega al lugar donde El Chavo y Quico pusieron el anuncio de reclutamiento, ambos quedan sorprendidos al verla y no pueden creer que sea la única persona que llegó. Megumin se desmaya, El Chavo y Quico le tiran agua porque recordaban que mencionaba ñoño que a los desmayados para despertarlos les titraban agua, Megumin se disgusta por como dos ñiños la despertaron, les dice que se desmayo por que no ha comido en 3 días, pero El Chavo dice que él una vez se desayuno dos veces, una en febrero y otra en agosto, provocando que Megumin lo mire con verguenza.
De repente, El Chavo y Quico notan que Megumin es una bruja y empiezan a tener miedo. Ellos le dicen que no quieren tener problemas con las brujas y le preguntan si no puede usar su magia para conseguir comida en lugar de ir a cazar sapos gigantes. Megumin se sorprende por su actitud, pero accede a ayudarlos, pero primero les enseñara a conseguir comida como conjeos por la caza y les enseña cómo conseguir una buena comida con cazeria en el bosque. El Chavo y Quico quedan impresionados con su habilidad y comen con gusto.
Después de comer, Megumin se ofrece a ayudarlos a cazar el sapo gigante, pero El Chavo y Quico se niegan rotundamente y le dicen que no quieren tener problemas con las brujas de la ciudad, especialmente por la que habia en su vecindad que se llamaba Doña Cleotilde. Megumin se ríe de su miedo y se marcha. El Chavo y Quico se quedan solos y se preguntan si deberían seguir intentando encontrar alguien para unirse a su grupo de aventureros.
El chavo, Quico y Megumin se dirigen al bosque para cazar al sapo gigante. Durante el camino, Megumin les pregunta de dónde obtuvieron sus armas, El chipote chillon, las pastillas de chiquitolina y la chicharra paralisadora y reconoce el estilo del Chapulín Colorado. El chavo y Quico se sorprenden de que Megumin conozca al Chapulín, y ella les cuenta que hace unos meses él la salvó de un demonio.
Llegando al bosque, los tres comienzan a buscar al sapo gigante. Megumin saca su barita mágica y los niños se sorprenden al ver que es una bomba atómica , ya que solo sirve para lanzar explosiones mágicas. Con la que mataron al sapo gigante que atacaba la granja
Creyeron que ahi acabaria la mision,Sin embargo, sale otro sapo más fuerte de lo que esperaban sale comienzan a tener problemas. Megumin se queda sin energía y se desmaya.
El chavo y Quico, asustados por la situación, deciden que deben huir. Pero antes de que puedan hacerlo, Megumin grita, la chichara, la chichara
Al final, los tres deciden seguir buscando misiones, pero esta vez más acorde a sus habilidades. Y aunque todavía tienen miedo de las brujas, aceptan a Megumin como parte de su equipo y continúan su aventura juntos. A la siguiente Quico por idea de Megumin uso su Chicharra paralizadora para detener al sapo y El chavo lo remata con su chipote
El Chavo, Quico y Megumin están caminando de regreso al gremio después de haber cazado un sapo gigante para la misión que habían aceptado. Mientras caminan, Megumin les cuenta cómo el Chapulín Colorado les había ayudado a resolver el problema de los sapos gigantes en la cuidad.
Megumin: "Saben, hace unos meses, en esta, la cuidad de Axel, teníamos un problema similar al de los sapos gigantes aquí. Venían decenas a atacar las granjas y devorar los cultivos. Pero un día, alguien me salvó. Era un superhéroe muy divertido, lo llamaban el Chapulín Colorado."
El Chavo y Quico miran a Megumin con curiosidad.
Megumin: "Y lo más sorprendente fue cómo solucionó el problema. Usó unas pastillas para encoger a los sapos gigantes y luego los cazó. Así que ahora solo hay unos pocos sapos, ya no vienen a atacar las granjas como antes."
El Chavo y Quico se quedan pensando en la idea de encojer sapos gigantes para cazarlos.
El Chavo: "¡Eso es genial! Podríamos intentarlo la próxima vez que tengamos que cazar un sapo gigante."
Quico: "¡Sí! Solo necesitamos pastillas de esas."
Megumin sonríe al ver la emoción de los dos niños.
Megumin: "Bueno, no estoy segura de que sea una buena idea, pero definitivamente sería interesante de ver."
Los tres llegan al gremio, contentos por haber completado su misión y con la esperanza de que la próxima vez puedan probar la técnica del Chapulín.
Después de haber cobrado el dinero por haber cazado los sapos, el grupo decide ir a gastar el dinero en comida y hospedaje. Mientras caminan, Megumin ve cómo Quico está gastando el dinero en cosas innecesarias.
Megumin: Oye, Quico, ¿qué estás haciendo? ¿No deberías ahorrar ese dinero para futuras misiones?
Quico: Ay, no te preocupes, Megumin, tenemos mucho dinero ahora mismo. Además, merecemos un buen descanso después de todo el trabajo que hemos hecho.
El Chavo: Sí, y la comida es deliciosa, ¿verdad?
Megumin: (suspira) Está bien, pero no malgastes todo el dinero. Necesitamos ahorrar para futuras misiones.
Después de disfrutar de una cena deliciosa, el grupo se dirige a la posada para pasar la noche. Sin embargo, Megumin se da cuenta de que Quico ha gastado todo el dinero en una habitación lujosa, dejándoles sin dinero para la noche siguiente.
a la noche siguiente
Megumin: (frustrada) Quico, ¿por qué gastaste todo el dinero en esto? ¿No deberíamos ahorrar algo?
Quico: (se encoge de hombros) Lo siento, Megumin. Pensé que merecíamos un buen descanso.
Megumin: (suspira) De acuerdo, pero mañana vamos a tener que encontrar una manera de ahorrar algo de dinero. ¿Qué tal si dormimos en los establos esa noche? Es baratoy podemos ahorrar algo de dinero.
El Chavo: (asombrado) ¿En los establos? ¿No es eso para los animales?
Megumin: (asintiendo) Sí, pero es barato y podemos ahorrar algo de dinero. Vamos, será divertido.
El Chavo: (suspirando) Está bien, si tú lo dices.
Finalmente, el grupo decide dormir en los establos. Aunque no es la habitación más cómoda, Megumin se siente satisfecha por haber ahorrado algo de dinero.
La mañana siguiente, Chavo, Quico y Megumin se reunieron en el gremio para discutir sobre agregar un cuarto miembro a su equipo.
"¿A quién podríamos agregar?" preguntó Quico.
"¿Qué tal Don Ramón?" propuso Chavo. "Él hizo muchos trabajos diferentes en México, seguro que tiene habilidades útiles para nuestra próxima misión".
Megumin parecía un poco confundida. "¿Quién es Don Ramón?" preguntó.
Chavo y Quico se sorprendieron al escuchar esto. "¡Es nuestro amigo!" exclamó Quico. "Vive en la vecindad, hace trabajos ocasionales, y a veces nos da dinero a nosotros los niños".
"Ah, ya veo", dijo Megumin. "Bueno, si creen que puede ser útil, podemos intentar reclutarlo".
havo: "Ojalá pudiéramos traer a Don Ramón aquí, sería el cuarto integrante perfecto para nuestro equipo."
Quico: "¡Sí! Don Ramón es muy bueno haciendo de todo. Siempre encontraba trabajo en México, desde vender churros hasta ser mecánico."
Megumin: "¿Cómo lo podemos encontrar?"
Chavo: "No sé, quizás deberíamos poner un anuncio en el gremio diciendo que estamos buscando a un cuarto integrante y ver quién responde."
Quico: "¡Eso es una gran idea, Chavo!"
Megumin: "Pero asegúrense de poner en el anuncio que no queremos a nadie con miedo a las brujas como ustedes dos."
Chavo y Quico se miran incómodos, recordando su miedo a Doña Cleotilde.
Chavo: "No te preocupes, Megumin, no pondremos eso en el anuncio."
Quico: "¿Qué tal si ponemos que estamos buscando a alguien valiente y aventurero?"
Megumin: "Eso suena mejor."
Chavo: "¡Perfecto! Mañana mismo pondremos el anuncio y esperamos encontrar a nuestro cuarto integrante."
Megumin: "¡Genial! Ahora, ¿qué tal si buscamos alguna misión para hacer hoy?"
Los tres amigos se ponen de pie y salen del gremio, listos para buscar su próxima aventura.
La escena comienza con el Chavo caminando por las calles de Axel, la ciudad principal del mundo de fantasía. De repente, choca con alguien y cae al suelo. Cuando se levanta, se da cuenta de que es Don Ramon.
El Chavo: ¡Don Ramon! ¿Qué hace usted por aquí?
Don Ramon: ¡El Chavo! ¡Qué sorpresa! Yo... yo estaba buscando trabajo. ¿Y tú?
El Chavo: Yo estoy aquí con Quico y Megumin, cazando sapos gigantes para ganar dinero. ¿Te unirías a nosotros?
Don Ramon: ¿Unirme a ustedes? No sé... ¿Cómo llegaste aquí tú?
El Chavo: Pues... no sé. Solo aparecí aquí un día. Pero eso no importa. "Don Ramón, necesitamos su ayuda para una misión", comenzó Chavo.
Don Ramón frunció el ceño. "Lo siento, niño, pero no soy un aventurero. Hago trabajos ocasionales aquí y allá, pero nada peligroso".
"Lo entendemos, pero creemos que podrías ser útil para nosotros", intervino Quico. quien habia aparecido de la nada
Después de que Don Ramon piense que los niños se iban a matar otra vez si siguien siendo aventureros por su cuenta , Don Ramón finalmente aceptó unirse al equipo. "Bueno, supongo que puedo intentarlo", dijo. "Pero solo si hay algo de dinero involucrado".
Los cuatro aventureros regresaron al gremio, ansiosos por comenzar su próxima misión.
Don Ramon: Bueno, supongo que sí. No tengo mucho que hacer aquí de todas formas.
Así fue como Don Ramon se unió al grupo de aventureros del Chavo, Quico y Megumin. Al principio, todos se alegraron de tenerlo allí, pero luego comenzaron a notar que Don Ramon evitaba responder preguntas sobre cómo llegó al mundo de fantasía.
Chavo: Don Ramon, ¿no nos vas a decir cómo llego aquí?
Don Ramon: Ah, eso no es importante. Lo que importa es que estamos aquí juntos.
Quico: Pero, Don Ramon, si no sabemos cómo llegaste aquí, ¿cómo sabemos que eres confiable?
Don Ramon: ¡Cómo te atreves a cuestionar mi confiabilidad, Quico! Yo soy un hombre honesto.
Megumin: (murmurando) Honestamente evasivo...
A pesar de sus dudas, el grupo continuó trabajando juntos, cazando sapos y completando otras misiones. A medida que pasaba el tiempo, Don Ramon demostró ser un líder astuto y habilidoso, y su presencia en el grupo se volvió cada vez más valiosa.
Al final, aunque nunca supieron exactamente cómo llegó Don Ramon al mundo de fantasía, el Chavo, Quico y Megumin estaban contentos de tenerlo a su lado como amigo y compañero aventurero.
El Chavo, Quico y Don Ramon Cap 2
Don Ramón, emocionado de formar parte del grupo, comienza a interactuar con el Chavo, Quico y Megumin, y se entera de las armas del chapulin y la magia explosiva que cada uno posee. Al enterarse de la habilidad mágica de Megumin, Don Ramón se muestra impresionado y le pregunta si podría enseñarle algunos trucos.
Megumin, encantada de tener un aprendiz, le explica que ella solo sabe hacer un tipo de magia, la explosión, y que requiere de una vara mágica para canalizar sus poderes. Don Ramón, recordando su experiencia en el mundo de los superhéroes, saca de su mochila una vara mágica que encontró en una de sus aventuras.
El Chavo y Quico se sorprenden al ver que Don Ramón también tiene una vara mágica y le preguntan si sabe hacer magia. Don Ramón, un poco incómodo, admite que nunca ha intentado hacer magia, pero que está dispuesto a aprender. Megumin, emocionada, comienza a enseñarle los movimientos necesarios para lanzar un hechizo de explosión.
Después de varios intentos fallidos, Don Ramón finalmente logra lanzar su primer hechizo, causando una pequeña explosión que sorprende a todos. A partir de ese momento, Don Ramón se convierte en el aprendiz de Megumin y se dedica a practicar la magia en sus ratos libres, mientras que el Chavo y Quico lo animan desde la distancia y tratan de aprender algunos trucos por su cuenta.
La escena comienza con El Chavo y Quico sentados en una mesa, contando el dinero que habían obtenido de la venta de las pastillas de Chiquitolina. Ambos se sienten muy orgullosos de sí mismos y comienzan a planear cómo gastar su dinero. De repente, Don Ramon llega a la habitación y se sorprende al ver todo ese dinero.
Don Ramon: ¿Qué es todo ese dinero?
El Chavo: Es el dinero que ganamos vendiendo las pastillas de Chiquitolina, Don Ramon.
Quico: Sí, y estamos muy contentos porque ahora podemos comprar lo que queramos.
Don Ramon: ¿Y qué van a comprar con todo ese dinero?
El Chavo: (con entusiasmo) ¡Podemos comprar comida, ropa, juguetes!
Quico: ¡Y podemos hospedarnos en una posada mejor!
Don Ramon: (molesto) ¡No puedo creerlo! Ustedes dos siempre pensando en gastar el dinero en cosas innecesarias.
El Chavo: Pero, ¿por qué no podemos disfrutar de nuestro dinero?
Quico: (defensivo) Sí, no hemos tenido mucho en nuestras vidas.
Don Ramon: (con tono serio) Escuchen, el dinero no crece en los árboles, y las pastillas de Chiquitolina no son para jugar ni para malgastar en tonterías. Tienen que aprender a administrar el dinero y pensar en el futuro.
El Chavo: (confundido) ¿Cómo hacemos eso?
Quico: (asintiendo) Sí, Don Ramon, ¿cómo lo hacemos?
Don Ramon: (suspirando) Primero, tienen que dejar de vender las pastillas de Chiquitolina. Ya no hay muchas y es importante ahorrarlas. Segundo, necesitan pensar en maneras de ganar dinero de manera responsable. Y tercero, deben tener un presupuesto y gastar sabiamente.
El Chavo: (asombrado) Wow, Don Ramon, siempre sabe lo que hacer.
Quico: (agradecido) Gracias, Don Ramon, siempre nos cuida.
Don Ramon: (sonriendo) No hay de qué, chicos. Siempre estoy aquí para ayudarlos. Ahora, vamos a pensar en maneras de ganar dinero responsablemente y ahorrar para el futuro.
Don Ramon, como experto albañil en el mundo de fantasía, lleva a El Chavo, Quico y Megumin a una construcción para trabajar y ganar algo de dinero. Los niños están un poco emocionados por la oportunidad de trabajar y ganar algo de dinero, pero también un poco preocupados porque no tienen mucha experiencia en la construcción.
Don Ramon les explica los conceptos básicos de la construcción, como cómo mezclar el cemento y cómo construir una pared correctamente. El Chavo y Quico se emocionan mucho y comienzan a ayudar a mezclar el cemento y a colocar los ladrillos en su lugar.
Después de un día de duro trabajo, los niños regresan a la posada donde se alojan. Están agotados pero felices de haber trabajado duro y ganado algo de dinero. Don Ramon les felicita y les dice que deben ser responsables con su dinero y usarlo sabiamente.
El Chavo y Quico aseguran que lo harán, aunque en secreto piensan en gastar el dinero en dulces y comida. Megumin, por otro lado, decide guardar su dinero para comprar más explosivos mágicos.
El Chavo y Quico trabajaban en la construcción con Don Ramón. Al momento de cavar un agujero, El Chavo y Quico comenzaron a pelearse por quién tenía que hacer el trabajo más difícil. Mientras discutían, accidentalmente cayeron dentro del agujero que estaban cavando y quedaron atrapados.
Don Ramón, al darse cuenta de que los niños no estaban trabajando, comenzó a buscarlos por toda la construcción. Finalmente, escuchó sus voces y se dio cuenta de que estaban atrapados en el agujero.
Don Ramón intentó sacarlos con una cuerda, pero resultó ser demasiado corta. Entonces, decidió bajar al agujero para ayudarlos. Pero al bajar, también quedó atrapado junto a ellos.
Desesperados por salir, El Chavo, Quico y Don Ramón comenzaron a gritar pidiendo ayuda. Los demás trabajadores los escucharon y corrieron para rescatarlos.
Finalmente, después de varios intentos, lograron sacar a los tres del agujero. Aunque con ropa y cuerpos llenos de polvo y tierra, los niños se dieron cuenta de lo peligroso que puede ser trabajar en la construcción sin tener experiencia y decidieron no volver a hacerlo.
Don Ramon estaba trabajando en una casa en construcción y decidió llevar al Chavo y Quico para que le ayuden. Mientras Don Ramon mezclaba el yeso para la pared, el Chavo y Quico jugaban cerca y comenzaron a hacer burbujas con el polvo blanco.
"¿Qué estás haciendo, Chavo?" preguntó Quico.
"Estoy haciendo leche de burra, ¿no lo ves?" respondió el Chavo mientras seguía mezclando.
"¿Leche de burra?" preguntó Quico confundido.
"Sí, para que crezcan los huesos, como decía la señora de la vecindad," dijo el Chavo, recordando una conversación que había escuchado entre las vecinas.
Quico decidió probar un poco del "líquido blanco" y dijo: "No sabe a leche de burra, sabe a yeso".
El Chavo también decidió probar y confirmó lo que Quico había dicho. "Sí, tienes razón, no es leche de burra. Es la leche de la pared", dijo el Chavo.
Don Ramon, quien había escuchado toda la conversación, se acercó a ellos y les explicó que eso era yeso y no se debía jugar con él. Los niños se disculparon y continuaron ayudando en la construcción, esta vez con mucho cuidado para no confundir la leche de burra con el yeso de la pared.
El sol brillaba fuerte en el cielo y el calor era agobiante en la construcción donde Don Ramón, el Chavo, Quico y Megumin trabajaban. Los cuatro se afanaban en sus tareas, mientras el albañil supervisaba la obra.
De repente, Quico perdió el equilibrio y cayó desde una altura de dos metros. Al tocar el suelo, hizo un fuerte ruido y se quejó de dolor.
El Chavo y Megumin corrieron a ayudarlo. "¡Quico, Quico! ¿Estás bien?", preguntó el Chavo.
Quico se agarraba la pierna y se retorcía de dolor. "¡Creo que me rompí todos los huesos!", exclamó.
El Chavo y Megumin, sin saber qué hacer, decidieron ponerle yeso y vendas para inmovilizar la pierna lesionada. Con las herramientas que tenían a mano, improvisaron un yeso con los materiales de construcción.
Don Ramón los encontró y se sorprendió al ver a Quico con la pierna vendada. "¿Qué le pasó a Quico?", preguntó.
El Chavo respondió: "Creímos que se rompió todos los huesos cuando cayó, así que le pusimos yeso para inmovilizarlo".
Don Ramón se rió. "¡No, no, no! No pueden ponerle yeso así como así. ¡Tienen que llevarlo al doctor!".
Quico, aliviado al saber que no tenía ningún hueso roto, se paró y empezó a caminar. "¡Miren, estoy bien! ¡No necesito ir al doctor!".
El Chavo, Megumin y Don Ramón lo miraron perplejos. "¡Es un milagro!", exclamó Don Ramón mientras se rascaba la cabeza.
Los cuatro se rieron y siguieron trabajando en la construcción, esta vez más cuidadosos para evitar cualquier otro accidente.
La escena comienza en la construcción donde Don Ramón, El Chavo y Quico se encuentran trabajando en la demolición de una pared. Megumin ha venido a visitarlos y está impresionada por la cantidad de explosiones que están haciendo para destruir la pared.
Megumin: Wow, nunca había visto tanta destrucción junta. Es impresionante.
El Chavo: ¡Sí, y lo mejor es que Don Ramón nos paga por hacer esto!
Quico: (murmurando) ¿De dónde saca el dinero este hombre?
De repente, Megumin se emociona y comienza a agitar su vara mágica.
Megumin: ¡Esperen, esperen! ¡Dejenme intentarlo yo!
Don Ramón: ¿Intentar qué?
Megumin: Quiero hacer explotar la pared con mi magia. ¿Puedo intentarlo?
Don Ramón: (dudando) No estoy seguro, no quiero que haya un accidente...
El Chavo: ¡Vamos, Don Ramón, déjela intentarlo! Será divertido.
Quico: (preocupado) No sé, ¿no podría lastimarnos con esa magia explosiva?
Megumin: No se preocupen, tengo mucho control sobre mi magia. (sonríe) Además, si algo sale mal, siempre puedo invocar a mi familiar.
Don Ramón: Bueno, está bien, pero asegúrate de que la explosión sea lo suficientemente controlada.
Megumin se prepara y agita su vara mágica, lanzando un hechizo que hace explotar la pared. Pero para sorpresa de todos, la pared que estaban demolendo no era la correcta y acaban destruyendo una pared que debía ser preservada.
Don Ramón: ¡No, no, no! ¡Esa pared no debía ser demolida! ¡Era una pared histórica!
El Chavo: Lo siento, Don Ramón, no sabíamos.
Quico: (señalando a Megumin) ¡Fue ella! ¡Fue su magia explosiva!
Megumin: (un poco avergonzada) Lo siento mucho, no me di cuenta de que era la pared equivocada.
Don Ramón: (suspirando) Bueno, no podemos hacer nada ahora. Tendremos que arreglar esto antes de que llegue el inspector.
El Chavo: (mirando a Megumin) Pero tienes que admitir que la explosión fue impresionante, ¿no es así?
Megumin: (sonriendo) Sí, definitivamente lo fue.
La escena comienza con Don Ramon llegando a la construcción con un semblante triste y preocupado. Al llegar, El Chavo, Quico y Megumin lo reciben con entusiasmo y le preguntan cómo le fue en la reunión con los jefes de la construcción. Don Ramon les mira y les dice que tiene malas noticias: lo han despedido por todos los errores que han cometido.
El Chavo, Quico y Megumin quedan en shock y se disculpan con Don Ramon, quien les dice que no se preocupen y que él se encargará de buscar otro trabajo.
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Don Ramon agradece a Megumin y a los niños por su ayuda y les dice que nunca había visto algo así en toda su vida. Los niños se despiden de él y le prometen que trabajarán duro para ser mejores en el futuro.
La escena termina con Don Ramon sonriendo y diciendo que no importa lo que pase, siempre tendrán un lugar en su corazón y en su equipo de trabajo.
La escena comienza con Don Ramón observando a El Chavo, Quico y Megumin mientras hacen un entrenamiento improvisado en el bosque cercano a la ciudad. Don Ramón los ha estado enseñando a boxear y defenderse de los monstruos que habitan en la zona.
Don Ramón: (observando con asombro a los niños) ¡Miren eso! El Chavo tiene una réplica del Chipote Chillon, Quico tiene las pastillas y la Chicharra paralizadora del Chapulín, y Megumin... ¿qué es lo que hace Megumin?
Megumin: (un poco apenada) Verás Don Ramón, yo puedo usar magia explosiva una vez al día, pero después me quedo sin energía por un tiempo.
Don Ramón: (sonriendo) No te preocupes, Megumin, eso es normal. Lo importante es que sepas cómo usarla adecuadamente y en el momento adecuado.
El Chavo: (con entusiasmo) ¡Sí, y yo puedo usar el Chipote Chillon para detener a los malos!
Quico: (orgulloso de sus pastillas) Y yo puedo vender estas pastillas para hacer mucho dinero.
Don Ramón: (frunciendo el ceño) Quico, ¿qué te he dicho sobre vender esas pastillas? Eso es peligroso y podría causar problemas graves.
Quico: (bajando la cabeza) Lo siento, Don Ramón.
Megumin: (intentando calmar la situación) Pero si usamos las pastillas para cazar sapos, podemos ganar algo de dinero para comprar suministros.
Don Ramón: (pensativo) Bueno, eso sí podría ser una buena idea. Pero recuerden, no deben malgastar el dinero.
El Chavo: (asintiendo) Sí, Don Ramón, no vamos a malgastar el dinero.
Quico: (confundido) ¿Qué significa "malgastar"?
Don Ramón: (suspirando) Eso significa gastar el dinero en cosas innecesarias, como dulces y juguetes, en lugar de usarlo para cosas importantes, como alimentos y medicinas.
Quico: (asintiendo) Oh, ya entiendo.
Megumin: (entusiasmada) ¡Y cuando use mi magia explosiva, puedo destruir a cualquier monstruo que se nos cruce en el camino!
Don Ramón: (sonriendo) Eso es muy valioso, Megumin. Pero también recuerda que la magia debe usarse con responsabilidad y precaución.
El Chavo: (contento) ¡Sí, Don Ramón, ahora sabemos cómo defendernos!
Quico: (optimista) Y con las pastillas y la magia, podemos hacer mucho dinero.
Don Ramón: (mirándolos con seriedad) Pero no olviden lo que les he enseñado. La lucha es solo una pequeña parte de lo que significa ser un héroe. La verdadera fuerza viene de adentro, de la honestidad, la bondad y el trabajo duro.
Los niños asienten en señal de acuerdo mientras Don Ramón los mira con orgullo. Aunque son jóvenes, ya están aprendiendo las lecciones que necesitan para convertirse en héroes de verdad.
Los Repoios
Don Ramon, El Chavo, Quico y Megumin estaban en el gremio de aventureros, en busca de una misión que pudieran llevar a cabo. De repente, una chica con aspecto de aventurera se acercó a ellos y se presentó como Chris.
Chris: Hola, soy Chris, ¿son ustedes nuevos en el gremio?
Don Ramon: Así es, acabamos de formar nuestro grupo.
Chris: ¡Genial! Me alegra ver a nuevos aventureros. Yo también estoy buscando un grupos temporal para unirme y realizar misiones juntos, puedo enseñar algunas tecnicas de Ladron a cambio de algo de beber.
El Chavo: ¿Cómo sabemos que no eres una ratera o algo así?
Quico: Sí, nos dijo que nos enseñaría técnicas de aventurero "Ladron", no podemos confiar en alguien así.
Chris: ¡Oh, no no no! No soy una ratera, soy una aventurera como ustedes. El gremio nos proporciona estas clases para aprender habilidades específicas.
El Chavo: Bueno, si el gremio lo dice, supongo que está bien.
Don Ramon: Además, si ella quiere unirse a nuestro grupo, tendremos que confiar en ella. ¿Qué dices, Chris?
Chris: ¡Perfecto! Estoy emocionada de unirme a su grupo, ¿tienen un nombre?
Don Ramon: Sí, nos llamamos "Los Valientes de Tacuba". ¿Qué les parece?
El Chavo: ¡Eso suena muy mexicano!
Quico: Sí, y Don Ramon es de México.
Megumin: Bueno, no importa el nombre, lo importante es que hagamos un buen trabajo juntos.
Chris: De acuerdo, ¿en qué misión quieren que los ayude?
Y así, los cinco aventureros comenzaron a planear su próxima misión. Aunque al principio dudaron de Chris, rápidamente se dieron cuenta de que era una gran adición a su grupo. Y, por supuesto, Don Ramon estaba orgulloso de liderar a un equipo tan valiente y unido.
Después de que Chris se presenta como aventurera y les habla sobre las habilidades de la clase Ladron, El Chavo, Quico y Don Ramon se emocionan y quieren aprenderlas. Chris les advierte que no deben usarlas para hacerle daño a otros aventureros, solo a enemigos, pero ellos asienten sin prestarle mucha atención.
Comienzan a practicar usando las habiliades Chris contra Megumin para que observen y les aparesca en su targeta y, para su sorpresa, descubren que son bastante buenos en ello.
"La técnica 'Steal' te permite quitarle un objeto aleatorio al oponente", explicó Chris. "Por ejemplo, si estás luchando contra un monstruo y lo usas, podrías quitarle un objeto útil para ti, como una poción o un arma". Usandola para quitare a Megumin su baston .
"¡Guau, eso suena genial!" exclamó emocionado El Chavo.
"La técnica 'Detección de enemigos' es muy útil para saber si hay alguien dentro de un perímetro que quiera hacerte daño", continuó Chris. "Te permite estar alerta y preparado para cualquier ataque". Ocultandose en un baril mientras le da un piedraso a megumin
"¡Eso es genial!" dijo Quico, asintiendo. Mientras megumin estaba caminando al baril y Chris les describe su distancia
"Y finalmente, la técnica 'Sigilo' te permite volverte invisible por un corto período de tiempo", concluyó Chris. "Es una habilidad muy útil para esquivar enemigos o realizar ataques sorpresa". Mientras se hacia casi invisible en el baril
Don Ramon frunció el ceño. "me gusta la idea de volverse invisible", dijo. "Me siento más cómodo luchando de frente pero".
"Pero Don Ramon, ¡podría ser divertido!" exclamó El Chavo. "Podríamos jugar un juego de escondidas".
Quico asintió enérgicamente. "Sí, sí, y si usamos 'Steal' podríamos quitarle algo a Don Ramon y luego usar 'Sigilo' para escondernos".
Chris se rió suavemente. "¡No, chicos, no es así como se supone que deben usar estas habilidades! Deben usarse para luchar contra los enemigos y ayudar a la gente". Saliendo de su escondite. Megumin la vio y le iba ha hacer explotar por lo del baston y el piedrazo
El Chavo, Quico y Don Ramon fueron a detener a Megumin antes e que use su magia explosiva, la explosion salio volando hacia arriba aunque por dentro seguían emocionados por las posibilidades de sus nuevas habilidades.
Al mirar sus tarjetas de aventurero, vieron que ahora estaban actualizadas con las técnicas "Steal", "Detección de enemigos" y "Sigilo". Se emocionaron al pensar en las aventuras que les esperaban y en cómo podrían usar estas habilidades para ayudar en las misiones.
El Chavo roba la comida de la mochila de Chris, Quico detecta que ella se está acercando y se esconde, y Don Ramon se vuelve invisible con sigilo y sale corriendo, asustando a Chris.
ellos se disculpan y prometen no volver a hacerlo. Chris, con algo de escepticismo, pues usaron bien las habiliades aunque contra ella, les enseña más técnicas, como el sigilo.
El Chavo intenta ser sigiloso y termina chocando contra una pared, haciendo que caigan unos ladrillos encima de Chris, quien se enfada y se va.
Don Ramon y Quico tratan de convencerla de que fue un accidente, mientras El Chavo sigue intentando ser sigiloso, sin éxito. Finalmente, Chris acepta volver a enseñarles, pero les advierte que deben tener mucho cuidado y ser más responsables.
Después de que El Chavo, Quico y Don Ramon aprendieran las técnicas de la clase Aventurero "Ladrón" de Chris, se quedaron observándola con curiosidad mientras ella explicaba el uso de cada una de ellas.
La escena comienza con Don Ramón y los niños en el campo, buscando repollos voladores. El Chavo y Quico están emocionados por poder usar las habilidades que aprendieron de Chris, mientras que Megumin está lista con su magia explosiva.
De repente, se escucha un ruido en el cielo, y todos miran hacia arriba para ver una bandada de repollos voladores acercándose. Los aventureros de Axel también llegan, listos para cazar repollos.
El Chavo, Quico y Megumin se preparan para usar sus habilidades, pero antes de que puedan hacerlo, los aventureros de Axel ya han comenzado a atacar a los repollos. El Chavo se siente frustrado porque no puede usar su habilidad de "Steal" para robar repollos de los aventureros.
Megumin intenta usar su magia explosiva, pero se da cuenta de que no tiene suficiente energía, ya que la usó en la construcción del día anterior. Quico intenta usar su habilidad de "Detección de enemigos", pero no puede concentrarse debido al ruido de los repollos voladores.
Don Ramón intenta atrapar a los repollos voladores con una red, pero termina enredado en ella él mismo. El Chavo y Quico tratan de ayudarlo, pero terminan atrapados en la red también.
Mientras tanto, los aventureros de Axel han capturado la mayoría de los repollos voladores, pero se sorprenden al descubrir que los tres niños y Don Ramón han quedado atrapados en su red.
Al final, todos logran liberarse y, aunque no capturaron muchos repollos, se divirtieron mucho intentándolo. El Chavo, Quico y Megumin están emocionados de seguir practicando sus habilidades de aventurero y de buscar nuevas aventuras en el futuro.
La escena comienza con Don Ramon sentado en una roca, mientras El Chavo y Quico lo escuchan con atención.
Don Ramon: Chavos, debo confesarles algo. Cuando reencarné en este mundo, me ofrecieron un poder invulnerable y la oportunidad de hacer un deseo si lograba derrotar al Rey Demonio.
El Chavo: ¿Un deseo? ¡Eso suena genial!
Quico: ¿Y piensas usar ese deseo para llevarnos de regreso a casa?
Don Ramon: Exactamente, Quico. Pero primero tengo que vencer al Rey Demonio.
De repente, Megumin llega corriendo con un periódico en la mano.
Megumin: ¡Don Ramon, Chavo, Quico! ¡Miren esto!
Les muestra el periódico, donde se puede leer la noticia de que El Chapulin Colorado ha capturado al General del Rey Demonio, Verdia el Dullahan, con su Chicharra paralisadora.
El Chavo: ¡Guau! ¡El Chapulin Colorado es un verdadero héroe!
Quico: Pero, Don Ramon, ¿qué pasa con tu deseo?
Don Ramon: (suspirando) Creo que tendré que pensar como usarlo.
El grupo se queda en silencio por un momento, hasta que El Chavo tiene una idea.
Pero primero, tenemos que asegurarnos de regresar a casa sanos y salvos.
El grupo dejarian de estar discutiendo sobre cómo podrían lograr vencer al Rey Demonio y regresar a casa, mientras Megumin los observa con una sonrisa en el rostro.
Los Caimanes y la liche
Don Ramon, El Chavo, Quico, y Megumin llegaron al río para purificarlo con un supuesto purificador instantaneo que compraron. Don Ramon había leído sobre la misión publicada por el gremio, y pensó que sería una buena oportunidad para ganar mucho dinero. Pero al llegar, se dieron cuenta de que el río estaba infestado de caimanes.
"¡Ay, ay, ay! ¿Cómo vamos a purificar este río con tantos caimanes?", exclamó Don Ramon.
"No te preocupes, Don Ramon, yo puedo ahuyentarlos con mi magia explosiva", dijo Megumin.
"Pero si lo haces, destruirás todo el ecosistema acuático", respondió Don Ramon.
"Entonces, ¿qué hacemos?", preguntó El Chavo.
"Don Ramon, ¿y si utilizamos la técnica de sigilo que nos enseñó Chris? Podríamos acercarnos sigilosamente y purificar el agua sin molestar a los caimanes", sugirió Quico.
Don Ramon pensó en la idea de Quico y decidió que era la mejor opción. Así que, todos juntos, usaron la técnica de sigilo para acercarse al agua. Con mucho cuidado, comenzaron a purificar el río.
Pero de repente, El Chavo tropezó y cayó al agua. Los caimanes empezaron a acercarse, y Don Ramon y Quico no sabían qué hacer para ayudarlo. De repente, Megumin se dio cuenta de que había usado toda su energía para la técnica de sigilo, por lo que no podía hacer nada más.
Justo cuando los caimanes estaban a punto de atacar a El Chavo, un grupo de aventureros liderados por el mismísimo Chapulín Colorado llegaron en su ayuda. Utilizando su famosa Chicharra Paralizadora, logró detener a los caimanes y rescatar a El Chavo del agua.
Don Ramon, agradecido con El Chapulín, a quien se sorprenda que tambien ayude gente de ese mundo y no sea un reencarnado decidió que en vez de purificar el río, iba a invitar a todos los aventureros a una gran fiesta en su casa para celebrar la valentía del héroe. Al final, aunque no ganaron la misión del gremio, lograron tener una gran fiesta con los aventureros y vivir una gran aventura.
La escena comienza en la casa de Don Ramón, quien se encuentra preocupado por su situación económica. El Chavo y Quico están sentados a su lado, mientras Megumin está revisando su libro de magia en un rincón de la habitación.
Don Ramón: (suspira) Necesito dinero, pero no quiero arriesgar la vida de ustedes.
El Chavo: ¿Y qué podemos hacer, Don Ramón?
Quico: Yo no quiero arriesgarme tampoco.
Megumin: (levantando la vista de su libro) ¿No hay misiones más fáciles que puedan hacer?
Don Ramón: He revisado todas las misiones en el gremio, pero todas implican peligros que no estoy dispuesto a correr.
El Chavo: ¿Ni siquiera una de encontrar un tesoro escondido o algo así?
Quico: ¡Eso suena divertido! ¡Podríamos encontrar un montón de oro y joyas!
Don Ramón: (frunciendo el ceño) Eso suena demasiado bueno para ser verdad.
Megumin: ¿Qué tal si hacemos algo más sencillo?
Don Ramón: ¿Como qué?
Megumin: Podríamos hacer trabajos de jardinería o limpieza.
El Chavo: ¡Pero eso no da tanto dinero!
Quico: (asintiendo) Sí, necesitamos algo que nos dé mucho dinero de una vez.
Don Ramón: (pensando) Hmm... no sé qué hacer.
Megumin: (sonriendo) ¿Qué tal si hacemos una venta de garage?
El Chavo: ¿Una qué?
Megumin: Una venta de garage. Vendemos las cosas que ya no usamos y ganamos dinero.
Quico: (animado) ¡Eso suena genial! ¡Podemos vender mis juguetes viejos!
El Chavo: (pensando) Yo tengo una pelota que ya no uso...
Don Ramón: (sonriendo) Me parece una buena idea. Empecemos a juntar las cosas que vamos a vender.
Los cuatro comienzan a buscar objetos que ya no usan, mientras hacen planes para su venta de garage. A pesar de la situación difícil, logran encontrar una solución creativa y juntos trabajan para salir adelante.
El grupo de aventureros conformado por El Chavo, Quico, Don Ramon, y Megumin, habían aceptado una misión del gremio para cazar a un "zombie maker" que estaba causando estragos en una aldea cercana. A pesar de que El Chavo le dio la garrotera por el tema de los zombies, todos estaban emocionados por la recompensa que ofrecía la misión.
Al llegar a la aldea, se encontraron con otra aventurera que también estaba en busca del mismo objetivo, era una chica vestida de negro con una armadura que cubría todo su cuerpo. La chica se presentó como Darkness, aunque su verdadero nombre era Lalatina Dustiness Ford.
Darkness les explicó que la recompensa por el "zombie maker" era muy alta y que ella había decidido tomar la misión para obtener el dinero que necesitaba para pagar sus deudas. Sin embargo, los chicos notaron que Darkness parecía disfrutar demasiado de la idea de matar zombies y eso les preocupó un poco.
Mientras discutían sobre cómo atrapar al "zombie maker", escucharon unos gritos provenientes del cementerio cercano. Al acercarse, se encontraron con una chica con orejas de gato, vestida con un largo vestido negro, quien estaba dando un funeral a unas almas en pena. La chica se presentó como Wiz y les explicó que ella estaba ahí para ayudar a las almas a encontrar la paz.
El grupo se sorprendió al enterarse de que los zombies no eran creados por un "zombie maker", sino que eran simplemente un efecto secundario de las actividades de Wiz en el cementerio. Darkness se emocionó al escuchar que también había una recompensa por atrapar a Wiz, pero el grupo se negó a ayudarla a capturarla.
En lugar de eso, decidieron ayudar a Wiz a encontrar una solución para el problema de los zombies. Juntos, trabajaron para purificar el cementerio y enviar a las almas en pena a descansar. Darkness, aunque un poco decepcionada de no obtener su recompensa, se hizo amiga de Wiz y decidió quedarse en la aldea para ayudar con la purificación.
Al final, el grupo no obtuvo la recompensa que esperaba, pero se sintió bien sabiendo que habían ayudado a las almas en pena a encontrar la paz. Además, se hicieron amigos de Darkness y Wiz, quienes se unieron a ellos en sus futuras aventuras.
El grupo estaba en busca de tesoros abandonados, y habían oído hablar del Calavoso de Keele, pero al llegar allí, los niños parecían un poco nerviosos. El grupo estaba en la entrada del calaboso de Keele, un lugar oscuro y tenebroso lleno de trampas y peligros, pero que según las leyendas, escondía tesoros y riquezas invaluables.
Don Ramón estaba emocionado por la idea de encontrar algo que les permitiera salir de su situación económica, pero los niños estaban asustados por el aspecto del lugar.
"¿Qué hay adentro?", preguntó el Chavo, temblando.
"Don Ramón, yo no quiero entrar", dijo Quico, aferrándose a la manga de su camisa.
Quico miraba hacia adentro del Calavoso y decía: "No sé si es una buena idea entrar ahí, parece bastante oscuro."
El Chavo estaba temblando y dijo: "A mi no me gusta este lugar, me da miedo".
"¡No hay nada que temer, chicos! ¡Solo necesitamos una fuente de luz para adentrarnos en la oscuridad!", exclamó Don Ramón, tratando de animar a los niños.
Don Ramón intentó tranquilizarlos: "No hay nada que temer, chicos. Yo estoy aquí para protegerlos. Además, con la magia de Megumin, podemos hacer explotar cualquier cosa que se nos interponga".
Pero Megumin interrumpió: "Bueno, eso es cierto, pero no puedo hacer explotar este lugar. Es demasiado estrecho y no quiero arriesgarme a causar un derrumbe".
El grupo estaba atascado, pero entonces,Justo en ese momento, una figura misteriosa apareció en la entrada del calaboso. Era Chris, con una capa y un sombrero de explorador.
"¿Qué están haciendo aquí, amigos?", preguntó, acercándose al grupo.
"Don Ramón quería buscar tesoros en el calaboso de Keele, pero los niños tienen miedo", explicó Megumin.
"Ah, entiendo", dijo Chris. "¿Qué tal si les consigo una fuente de luz?"
Chris sacó una linterna de su bolsillo y la encendió, iluminando el oscuro camino.
"¡Genial! ¡Vamos, chicos, ahora sí podemos entrar!", exclamó Don Ramón.
El Chavo y Quico todavía parecían nerviosos, pero con la ayuda de la luz de la linterna, pudieron ver un poco mejor.
"¡Cuidado con las trampas!", advirtió Chris, mientras avanzaban por el camino.
Megumin La encendió y hacia el interior del Calavoso. iluminó el camino y el grupo pudo entrar.
El grupo fue avanzando poco a poco, sorteando trampas y peligros, hasta que finalmente llegaron a una sala llena de tesoros y riquezas.
"¡Miren, miren! ¡Aquí está el tesoro!", exclamó Don Ramón, emocionado.
Pero cuando intentaron tomar algo, una alarma sonó y las puertas se cerraron.
"¡Ah no, ahora estamos atrapados!", exclamó el Chavo, temblando
Sin embargo, después de un rato, a El Chavo le dio la garrotera del miedo, y los demás tuvieron que salir corriendo para sacarlo del Calavoso.
Finalmente, después de mucho esfuerzo, lograron sacarlo de allí y pudieron continuar su búsqueda de tesoros en otro lugar."Don Ramón, ¿sabías que este lugar estaba lleno de trampas?", preguntó Chris.
"Bueno, tal vez un poco, pero no pensé que serían tan peligrosas", admitió Don Ramón.
Después de varios intentos, lograron salir del calaboso, pero sin ningún tesoro. Don Ramón se había emocionado demasiado, y los niños seguían asustados por la experiencia.
"Creo que por hoy es suficiente aventura", dijo Don Ramón, mientras se alejaban del lugar. "Volvamos a casa antes de que nos pase algo peor."
lnvierno
El Chavo, Quico y Don Ramón caminaban por la calle cubiertos con gruesos abrigos y bufandas. A pesar de que hacía mucho frío, no dejaban de asombrarse por la cantidad de nieve que había en las calles.
El Chavo: ¡Qué frío hace! Nunca había sentido algo así.
Don Ramón: Yo nunca pensé que el frío fuera tan fuerte. ¿Cómo hacen para soportarlo?
De repente, una ráfaga de viento frío sopló y los tres se abrazaron para calentarse. El Chavo empezó a temblar, sus dientes castañeteaban y sus labios se pusieron morados.
El Chavo: ¡Ay, ay, ay! Se me está congelando hasta el bigote.
Quico: Tranquilo, Chavo. Solo tienes que aguantar un poco más y luego nos calentamos en algún lugar.
Don Ramón: Sí, tienes razón. Vamos a buscar un lugar donde podamos calentarnos.
Caminaron un poco más y encontraron una cafetería. Entraron y se sentaron en una mesa cerca de la chimenea. El Chavo se acercó a la chimenea y extendió las manos para calentarlas.
El Chavo: ¡Qué bien se siente el calor! ¡Ya me siento mucho mejor!
Quico: Yo también. Este lugar es muy acogedor.
Don Ramón: Sí, es cierto. A veces uno no valora el calor hasta que lo pierde.
El camarero se acercó a ellos y les preguntó qué querían tomar. Los tres pidieron chocolate caliente y se relajaron mientras bebían su bebida caliente.
El Chavo: Esta bebida es lo mejor que he probado en mi vida.
Quico: Sí, es perfecta para el frío.
Don Ramón: Ya lo veo, el chocolate caliente es la clave para sobrevivir al invierno.
Se quedaron un rato más en la cafetería, charlando y riendo. Aprendieron que el invierno era muy diferente en otros países, pero que el chocolate caliente era una bebida universal para calentar el cuerpo y el alma. Finalmente, se levantaron y se despidieron del camarero, agradecidos por haber encontrado ese lugar cálido y acogedor.
El grupo de aventureros conformado por El Chavo, Quico y Don Ramon se adentraron en las montañas nevadas en busca de hadas de las nieves para cazarlas y obtener una buena recompensa en el gremio. Pero no contaban con que el General de las Nieves, una criatura temible que habita en las cumbres, aparecería en su camino.
El General de las Nieves era un ser alto y fornido, vestido con pieles de animales y armado con una enorme espada de hielo. Al ver al grupo de aventureros, se acercó amenazante, dispuesto a hacerlos pagar por invadir su territorio.
-¿Quiénes son ustedes y qué hacen aquí? -preguntó el General con una voz grave y fría como el hielo.
-Somos aventureros, estamos cazando hadas de las nieves -respondió Don Ramon con cierta valentía, aunque en realidad estaba temblando de miedo.
-¡Cazar hadas de las nieves! -exclamó el General enojado- ¿No tienen idea del daño que le hacen al ecosistema?
El General estaba a punto de atacar al grupo de aventureros cuando Don Ramon, usando su poder de invulnerabilidad, regalo de Aqua al reencarnar, se interpuso en su camino y recibió el golpe de la espada de hielo sin sufrir daño alguno.
-¡Tiene que ser broma! -exclamó el General sorprendido- ¿Cómo es posible que no hayas muerto?
-Verás, es que yo tengo un poder especial que me hace invulnerable a cualquier ataque -respondió Don Ramon con orgullo.
El General, al darse cuenta de que no podría vencer a Don Ramon, decidió retirarse, aunque no sin antes advertirle que se alejara de su territorio.
El grupo de aventureros, aliviado de haber sobrevivido al encuentro con el General de las Nieves, decidió abandonar su cacería de hadas y regresar al pueblo antes de que oscureciera y el frío se volviera insoportable.
El día estaba tranquilo y Megumin estaba enseñando a Quico algunos trucos de magia explosiva en un castillo abandonado. El Chavo se unió a ellos, ansioso por ver las explosiones en acción. Megumin estaba muy emocionada por tener un nuevo discípulo y quería mostrarle todo lo que sabía.
Quico estaba muy emocionado por aprender y quería impresionar a sus amigos con su nuevo conocimiento. Megumin le explicó detalladamente cómo funcionaba la magia explosiva y le mostró cómo hacerla correctamente. El problema era que Quico no sabía la cantidad real de energía que se necesitaba para hacer una explosión.
Emocionado, Quico comenzó a juntar energía mágica y lanzó un hechizo con todas sus fuerzas. La explosión fue tan fuerte que sacudió todo el castillo y los tres amigos fueron arrojados por el aire. Cuando cayó, Quico estaba agotado y no podía moverse.
El Chavo y Megumin corrieron hacia Quico para asegurarse de que estuviera bien. Pero Quico estaba completamente abrumado y agotado por la cantidad de energía que había utilizado. Megumin le explicó que no debía usar tanta energía y que debía aprender a controlarla.
Quico estaba avergonzado y asustado, pero Megumin lo tranquilizó y le dijo que no se preocupara, que todos cometían errores y que lo importante era aprender de ellos. Los tres amigos volvieron a casa cansados pero felices de haber tenido un día lleno de aventuras y aprendizaje.
El Chavo y Quico cargan a Megumin mientras caminan hacia la ciudad después de haber explotado el castillo abandonado. Quico está sudando profusamente y jadeando, mientras El Chavo también parece cansado pero trata de mantenerse fuerte.
El Chavo: ¿Estás bien, Megumin?
Megumin: (acostada en los brazos de los niños) Sí, estoy bien. Solo necesito descansar un poco.
Quico: (jadeando) Eso fue impresionante, Megumin. No sé cómo lo haces.
Megumin: (sonriendo) Es solo cuestión de práctica y controlar la cantidad de energía que utilizas. Tú también puedes aprender, Quico.
Quico: (mirando a Megumin con admiración) ¿De verdad? ¡Eso sería genial!
El Chavo: (mirando a Quico con preocupación) ¡No, no, no, Quico! ¿No te das cuenta de lo peligroso que es? Casi te matas la última vez.
Quico: (mirando a El Chavo con determinación) Lo sé, pero si Megumin puede hacerlo, entonces yo también puedo. Solo necesito ser más cuidadoso.
El Chavo: (suspirando) Está bien, pero prométeme que serás más cuidadoso. No quiero que te lastimes.
Quico: (asintiendo) Lo prometo, Chavo.
Megumin: (sonriendo) Me alegra ver que estás interesado, Quico. Te enseñaré todo lo que sé.
Los tres continúan caminando hacia la ciudad, mientras Quico está emocionado por su nueva habilidad de magia explosiva, y El Chavo sigue preocupado por su amigo.
El grupo estaba desesperado por encontrar un lugar para pasar la noche. El frío del invierno los había dejado sin fuerzas y no tenían idea de dónde podrían dormir.
De repente, Wiz apareció frente a ellos.
"¡Hola, amigos! ¿Qué les parece si les ofrezco una casa para pasar la noche?", preguntó Wiz con una sonrisa en su rostro.
"¡Eso sería genial!", exclamó el Chavo.
"¿Pero cómo podríamos conseguir una casa en medio de la nada?", preguntó Don Ramón.
Wiz sonrió y les explicó que ella sabía de una mansión abandonada que estaba infestada de espíritus chocareros. Si ellos la ayudaban a exorcizar la mansión, podrían quedarse allí durante la noche.
El grupo aceptó la oferta de Wiz y se dirigieron a la mansión. Cuando llegaron, Wiz comenzó a cantar un hechizo de exorcismo mientras El Chavo y Quico agitaban unos palos para espantar a los espíritus.
De repente, un espíritu se acercó a ellos y comenzó a hablar con una voz ronca.
"¿Qué están haciendo aquí?", preguntó el espíritu.
"Estamos exorcizando la mansión", respondió Wiz.
El espíritu se rió. "¿Exorcizando? ¿Por qué querrían hacer eso? Esta es mi casa".
Wiz trató de explicar que la mansión estaba abandonada, pero el espíritu no quería escucharla. Finalmente, Don Ramón se acercó al espíritu y le ofreció un trato.
"Si nos dejas quedarnos aquí esta noche, te prometemos que no te molestaremos más", dijo Don Ramón.
El espíritu pareció considerar la oferta por un momento antes de aceptarla. "Está bien, pueden quedarse, pero no hagan demasiado ruido", dijo antes de desaparecer.
El grupo se instaló en la mansión y pasaron una noche tranquila, aunque El Chavo y Quico no pudieron evitar sentir un poco de miedo por los espíritus que todavía estaban en la casa.
Al día siguiente, Wiz les agradeció por su ayuda y les dejó quedarse en la mansión todo el tiempo que quisieran.
"Es lo menos que podía hacer después de que me ayudaron a exorcizar la casa", dijo Wiz con una sonrisa. "Además, no tengo muchos amigos aquí en este mundo, así que me encantaría que se quedaran".
El grupo se sintió aliviado por haber encontrado un lugar donde poder pasar la noche y agradecido por la amistad de Wiz.
Sucubos
La escena comienza en el gremio, donde Don Ramon se encuentra tomando alcohol en compañía de El Chavo, Quico y Megumin. En un momento de la conversación, un aventurero comenta sobre un negocio en el pueblo donde se pueden contratar sucubos para tener sueños personalizados.
Don Ramón estaba sentado en el gremio, disfrutando de un vaso de alcohol mientras escuchaba las conversaciones de los aventureros a su alrededor. Fue entonces cuando escuchó a un grupo de ellos hablando sobre un nuevo negocio en el pueblo: la contratación de una súcubo para tener sueños personalizados.
"¿Qué es eso de la súcubo para los sueños personalizados?" preguntó Don Ramón con curiosidad.
Uno de los aventureros se acercó a él y le explicó: "Es un negocio en el que puedes pagar a una súcubo para que te visite en tus sueños y te dé una experiencia personalizada. Puedes hacer cualquier cosa que desees, en cualquier lugar, y todo se siente real. Es una experiencia increíblemente intensa."
Don Ramon se interesa en la idea y comienza a preguntar sobre cómo funciona. El aventurero le explica que las sucubos pueden crear sueños basados en las preferencias del cliente y que, si se siguen las instrucciones adecuadas, pueden ser una experiencia única y muy agradable.
Don Ramón se emocionó al escuchar eso, y decidió que necesitaba tener esa experiencia. "¡Tengo que intentarlo!" exclamó, levantándose de su asiento.
Los aventureros lo miraron con sorpresa, pero no dijeron nada. Don Ramón salió del gremio y se dirigió al pueblo, ansioso por encontrar el negocio de la súcubo.
Después de buscar un rato, finalmente encontró el lugar. Era un pequeño edificio en el centro del pueblo, con un letrero que decía "Restaurante".
Don Ramón entró en el edificio, nervioso pero emocionado. Se acercó a la recepción y preguntó sobre el servicio. La recepcionista le explicó los detalles y Don Ramón aceptó.
Esa noche, Don Ramón se acostó en su nueva cama, ansioso por tener la experiencia de su vida. Cerró los ojos y se concentró en su deseo más profundo: Y entonces, se quedó dormido.
Cuando despertó, se sentía completamente renovado. Se sintió como si hubiera vivido una vida entera en una sola noche, y se dio cuenta de que la súcubo había cumplido su deseo: había tenido éxito en todo lo que había intentado.
Don Ramón sonrió con satisfacción, sabiendo que había tomado la decisión correcta al contratar a la súcubo. Se levantó de la cama y se dirigió al gremio para contar su experiencia a los aventureros, y les dijo que debían probarlo por sí mismos.
Don Ramon, emocionado por la idea, decide visitar el lugar. Sin embargo, después de algunas visitas, se da cuenta de que el alcohol afecta negativamente la calidad de los sueños y decide ir sin beber.
Pero un día, mientras está en el local de las sucubos, El Chavo, Quico y Megumin pasan por el restaurante y deciden entrar para ver qué hay. Don Ramon entra en pánico al darse cuenta de que pueden descubrir su secreto y hace lo posible para evitar que se den cuenta de dónde están.
Sin embargo, los chicos comienzan a notar que Don Ramon tiene un comportamiento extraño cada vez que pasan por el restaurante y deciden investigar por su cuenta. Don Ramon se encuentra en una situación complicada y tendrá que usar su astucia para evitar que descubran su secreto. Don Ramon estaba cada vez más preocupado de que El Chavo, Quico y Megumin descubrieran su secreto sobre el servicio de personalización de sueños por sucubos. Decidió hacer varios intentos para evitar que descubrieran el lugar.
En el primer intento, intentó distraerlos llevándolos a un parque de diversiones. Pero Quico se dio cuenta de que estaban cerca del lugar y comenzó a sospechar. En el segundo intento, trató de sobornarlos con golosinas, pero El Chavo no estaba interesado y Megumin se dio cuenta de que algo estaba mal.
En el tercer intento, decidió llevarlos a un museo, pero mientras estaban allí, El Chavo escuchó a alguien mencionar el nombre del local y se dio cuenta de que estaban cerca. Don Ramon comenzó a entrar en pánico, pero decidió intentar una última táctica.
Llevó a los chicos a una feria en la que había muchos juegos y atracciones, y mientras ellos estaban entretenidos, Don Ramon corrió hacia el local de las sucubos para asegurarse de que todo estaba en orden. Sin embargo, cuando regresó, se dio cuenta de que los niños habían seguido sus pasos y lo estaban esperando.
El Chavo lo miró seriamente y le preguntó: "¿Por qué estás yendo a un restaurante tan extraño?" Don Ramon intentó explicar, pero los niños no parecían estar convencidos. Finalmente, Don Ramon decidió contarles la verdad a medias, y los niños se rieron de la situación, diciendo que no les importaba lo que hiciera en su tiempo libre siempre y cuando no estuviera en peligro.
Don Ramon se encontraba nervioso ante la posibilidad de que El Chavo, Quico y Megumin descubrieran su secreto sobre las sucubos. Así que decidió hablar con ellos para evitar cualquier malentendido.
"Niños, hay algo que tengo que decirles", comenzó Don Ramon, mientras trataba de mantener la calma. "Ustedes saben que a veces me gusta tomar una copa en el gremio, ¿verdad?"
El Chavo, Quico y Megumin asintieron con la cabeza, esperando a ver adonde quería llegar Don Ramon con todo eso.
"Bueno, resulta que conocí un lugar muy interesante. Es un restaurante que ofrece una experiencia única para dormir mejor por las noches. Las mesas son muy cómodas y las chicas que te atienden son muy amables", explicó Don Ramon.
El Chavo, Quico y Megumin parecían confundidos, así que Don Ramon continuó hablando para asegurarse de que entendieran.
"Lo que hacen estas chicas es ayudarte a tener sueños más agradables y personalizados, para que puedas descansar mejor. Es un servicio muy útil, especialmente cuando se tiene dificultades para conciliar el sueño", dijo Don Ramon, tratando de mantener la seriedad en su voz.
Los niños se miraron entre ellos, un poco perplejos, pero al final asintieron con la cabeza. Aunque no estaban muy seguros de lo que había querido decir Don Ramon, decidieron no indagar más en el asunto.
"Ah, ya entiendo, Don Ramon. Gracias por explicarnos", dijo El Chavo con una sonrisa.
Don Ramon suspiró aliviado, pensando para sí mismo que había logrado salir del apuro. Aunque sabía que nunca podría volver a ese lugar, al menos había evitado que los niños se enteraran de la verdad sobre las sucubos.
Destroyer
La Fortaleza Destroyer estaba cada vez más cerca del pueblo de Axel, y Chris estaba en un completo estado de pánico. "¡Oh, y ahora quién podrá defenderme!" gritó desesperada, recordando al legendario Chapulín Colorado.
De repente, la figura del Chapulín apareció ante Chris. "¡No te preocupes, joven ciudadano! El Chapulín Colorado siempre está dispuesto a ayudar", dijo con su voz característica. Pero en ese momento, no se le ocurrió mejor idea que empujar el pueblo entero.
Mientras tanto, Darkness y Wiz estaban luchando contra el Destructor desde dentro. El Chapulín se unió a la lucha y, aunque no tenía ningún poder mágico, su astucia y habilidad para improvisar le permitieron causarle daño al enemigo.
Mientras tanto, en la superficie, El Chavo, Quico y Don Ramón estaban empujando la ciudad en un intento de escapar del Destructor. A pesar de que no sabían lo que estaba sucediendo en el interior de la Fortaleza, sabían que algo muy malo estaba sucediendo.
Finalmente, gracias a los esfuerzos combinados del grupo, la Fortaleza Destroyer fue destruida pero se auto exploto . Y aunque el pueblo había sufrido algunos daños, El Chavo, Quico y Megumin se salvaron por ponerse detras de Don Ramón , Megumin se sentia orgullosa de haberse salido del empuje para aplicarle una de sus explosiones al destructor cuando este ya estaba casi acabado .
Después de la batalla contra el Destructor, la ciudad de Axel se encontraba en ruinas y los ciudadanos se encontraban preocupados por el futuro del pueblo. Sin embargo, El Chavo, Quico y Don Ramón estaban contentos con su hazaña de haber empujado la ciudad para ayudar en la batalla.
Mientras los demás estaban ocupados ayudando en los trabajos de reconstrucción, los tres amigos se pavoneaban por la ciudad contándole a todos su hazaña. "¡Lo empujamos! ¡Si no lo empujábamos, la ciudad estaría destruida!" decía El Chavo con orgullo. "Eso es correcto, pero si no hubiera sido por nosotros, el Destructor no habría sido destruido desde adentro", se defendió Wiz.
De repente, una anciana que había perdido su casa en la batalla se acercó a ellos con lágrimas en los ojos. "¿Cómo se atreven a estar orgullosos de lo que hicieron? ¡Mi casa y todas mis posesiones están destruidas! ¡No es algo para presumir!" exclamó.
Los tres amigos se sintieron avergonzados y se disculparon con la mujer. "Lo siento, señora. No nos dimos cuenta de que nuestras acciones podrían haber causado daño", dijo Quico. "Tiene razón, no deberíamos estar presumiendo en una situación como esta", agregó Don Ramón.
Después de esa lección, El Chavo, Quico y Don Ramón decidieron que en lugar de jactarse de su hazaña, trabajarían para ayudar en la reconstrucción de la ciudad. Juntos, se unieron a los demás en la tarea de restaurar la ciudad a su antigua gloria, sin importar cuánto tiempo les tomara.
El Chavo, Quico y Don Ramon estaban paseando por el pueblo cuando vieron un grupo de guardias llevando a Darkness en custodia.
"¿Qué está pasando?", preguntó El Chavo.
"No lo sé, pero parece que están arrestando a Darkness", respondió Quico.
Don Ramon frunció el ceño y se acercó a los guardias.
"¿Qué le hicieron a la señorita?", preguntó.
"Es acusada de destruir la mansión del feudal Albert al teletransportar la fuente del destructor allí", explicó el guardia.
"Pero no lo hizo sola, yo también ayudé", interrumpió Wiz, que había estado siguiendo al grupo.
El Chavo, Quico y Don Ramon intercambiaron miradas sorprendidas.
"¿Tú también, Wiz? ¡Pero eres una lich! ¿Cómo puedes ser arrestada?", preguntó Quico.
"Creo que están haciendo una excepción por el feudal Albert", respondió Wiz con un suspiro.
"¡No es justo! ¡Tenemos que hacer algo para ayudarlas!", dijo El Chavo.
Don Ramon asintió enérgicamente. "Tienes razón, mi querido Chavo. Vamos a buscar al chapulín colorado. Él sabrá qué hacer".
Los cuatro amigos salieron corriendo del pueblo en busca del héroe mexicano. Mientras tanto, Darkness y Wiz fueron llevadas a la cárcel.
El día del juicio finalmente llegó y El Chavo, Quico, Don Ramon y Megumin fueron llamados como testigos en defensa de Darkness y Wiz. Estaban todos reunidos en la corte, con el juez y el feudal Albert presentes.
El juez llamó a El Chavo al estrado y le preguntó: "¿Puede decirme lo que sabe acerca de la acusación contra Darkness?"
El Chavo respondió: "Bueno, señor juez, Darkness no fue la única responsable. Todos trabajamos juntos para detener al destructor. Fue un esfuerzo en equipo. Y si no hubiéramos encojido la fuente del destructor y teletransportado, habría sido peor. ¡Nos habría aplastado a todos!"
El juez asintió y luego llamó a Quico al estrado. "¿Puede decirme usted qué vio en la mansión del feudal Albert después de la batalla?"
Quico respondió: "Vi a Wiz, y ella estaba tratando de arreglar la fuente. Parecía que estaba tratando de reparar el daño que habíamos causado. Y Darkness estaba allí también, asumiendo la responsabilidad. Pero en realidad, todos trabajamos juntos para detener al destructor. Fue un esfuerzo en equipo".
Don Ramon y Megumin también dieron testimonio, diciendo que todos habían trabajado juntos para detener al destructor y que Darkness había asumido la responsabilidad para proteger a los demás.
El feudal Albert se sorprendió al escuchar el testimonio y decidió retirar los cargos contra Darkness y Wiz. Pero él también quería negociar con Darkness en privado.
Después de algunas conversaciones en privado, Darkness y el feudal llegaron a un acuerdo. Un matrimonio arreglado con su hijo. A cambio, el feudal retiraría todos los cargos y pagaría una indemnización a la ciudad para cubrir los daños causados por la batalla.
El Chavo, Quico, Don Ramon y Megumin se sintieron aliviados de que todo hubiera terminado bien y de que Darkness y Wiz fueran absueltas de los cargos. Todos se fueron a casa juntos, felices de haber podido ayudar a sus amigos en su momento de necesidad.
El Chavo, Quico y Megumin estaban sentados en el gremio cuando escucharon el rumor sobre el matrimonio arreglado entre Darkness y el hijo del feudal, Vadar. Los tres se miraron, claramente sorprendidos.
El Chavo fue el primero en hablar: "¿Matrimonio arreglado? ¿Qué es eso?"
Megumin trató de explicar: "Es cuando los padres deciden que dos personas deben casarse, y ellos no tienen nada que decir al respecto. para consolidar alianzas políticas. Aunque, en estos tiempos, es muy raro que se haga eso."
El Chavo parecía un poco confundido: "Pero, ¿no debería ser la persona quien decide con quién quiere casarse?"
Quico y Megumin asintieron. Entonces, Don Ramón entró en el gremio, y al escuchar la conversación, preguntó: "¿De qué están hablando?"
Los niños le explicaron el rumor que habían escuchado, y Don Ramón frunció el ceño: "Eso no suena bien. Si Darkness no quiere casarse con ese chico, no debería tener que hacerlo."
Los niños asintieron en acuerdo. Entonces, Megumin se levantó de su silla y dijo: "Creo que deberíamos hablar con Darkness y preguntarle qué piensa sobre todo esto."
El Chavo, Quico y Don Ramón estuvieron de acuerdo y juntos se dirigieron a la mansión de Darkness para hablar con ella sobre el rumor. Pero luego se acordaron ue . Primero por el momento solo era un rumor, y segundo , ella es una nobkle, no pueden entrar a una charla asi nomas en su casa .Asi que solo le piden a wiz, que es su amiga, que hable con ella.
Megumin sale del gremio y se encuentran con la amiga , Yunyun. Después de las presentaciones, Yunyun desafía a Megumin a un duelo de hechizos. Megumin acepta el reto y comienza el duelo.
Sin embargo, para sorpresa de todos, Yunyun se deja ganar en cada ronda. Don Ramon, que estaba observando detenidamente, nota que Yunyun tiene una gran habilidad con la magia, y que incluso es capaz de hacer más hechizos que Megumin.
Don Ramon estaba preocupado porque sabía que el invierno estaba por terminar y pronto tendrían que enfrentarse a la oscuridad de la noche para hacer sus tareas diarias. Recordando su experiencia en el calabozo de Keele, decidió tomar cartas en el asunto y contratar a un aventurero experto en arquería que pudiera enseñarles la habilidad "visión perfecta".
El aventurero se presentó en la vecindad y empezó a explicar la técnica a Don Ramon, El Chavo y Quico. Les dijo que para poder ver en la oscuridad necesitaban enfocarse en un punto fijo en la distancia y luego relajar sus ojos para que la visión periférica se expandiera.
Don Ramon estaba teniendo dificultades para entender la técnica, así que el aventurero decidió darle un ejemplo práctico. Les pidió que observaran un pequeño pájaro en lo alto de un árbol a unos 100 metros de distancia. El Chavo y Quico se concentraron y pudieron ver al pájaro con facilidad, pero Don Ramon seguía sin entender.
El aventurero decidió probar otra estrategia y les pidió que observaran una casa en la colina a varios kilómetros de distancia. Don Ramon se enfocó en el objetivo y logró ver la casa, pero no pudo evitar comentar: "¿Por qué la casa se ve tan pequeña? ¡Parece de juguete!". El aventurero le explicó que era normal, que la distancia hacía que los objetos se vieran más pequeños.
El Chavo y Quico se burlaban de Don Ramon por su falta de comprensión, pero él seguía intentando. Finalmente, después de varias horas de práctica, Don Ramon logró dominar la habilidad y se sintió muy orgulloso de sí mismo.
Con la nueva habilidad, los tres amigos podían ver en la oscuridad y a grandes distancias, lo que les permitía hacer sus tareas diarias con mayor facilidad y sin temor a la noche. El invierno llegó a su fin y el grupo se despidió del aventurero, agradeciéndole por su ayuda.
Después de varias misiones exitosas, el grupo formado por Don Ramón, El Chavo, Quico, Megumin comenzaron a acumular riquezas. Con tanto dinero, decidieron que era hora de invertir en mejorar sus habilidades y equipos.
Se dirigieron al mercado y comenzaron a comprar todo lo que necesitaban. El Chavo y Quico compraron nuevas cinturones para portar sus armas, mientras que Megumin compró un nuevo baston. Don Ramón, por su parte, compró una armadura de acero y un escudo.
Después de hacer sus compras, decidieron ir a cenar en un restaurante de lujo. El Chavo estaba emocionado porque nunca antes había comido en un lugar tan elegante. Cuando llegaron, se sorprendieron al ver que todo en el menú era extremadamente caro. A pesar de todo, decidieron pedir algunos platos y disfrutar de la comida.
Mientras esperaban sus comidas, El Chavo comentó que preferiría comer tortas de jamón en lugar de hamburguesas de sapo. Todos se rieron de su comentario, pero estuvieron de acuerdo en que, después de tantas aventuras, merecían un buen festín.
Finalmente, llegaron los platos y todos empezaron a disfrutar de la deliciosa comida. A pesar de que los precios eran altos, todos estaban felices de poder permitirse un momento de lujo después de tanto trabajo duro.
El grupo se encontraba en el gremio leyendo el periódico cuando se encontraron con la noticia de las aguas termales contaminadas. Don Ramón fue el primero en comentar al respecto.
Don Ramón: ¿Han leído la noticia de las aguas termales? Parece que fueron contaminadas por el general del Rey demonio.
El Chavo: ¿Qué es eso de un slime de veneno mortífero mutante?
Megumin: Es un monstruo que puede matar a una persona con su veneno, y al ser mutante, es más peligroso.
Quico: ¡Eso es muy peligroso! ¿Cómo lo detuvieron?
El Chavo: ¡Ah! Ya veo, el Chapulín Colorado lo detuvo con sus pastillas de chiquitolina y su chicharra paralizadora.
Don Ramón: Sí, pero las aguas termales estarán fuera de servicio durante dos meses mientras las purifican.
Wiz: Qué mala suerte, justo ahora que quería relajarme en las aguas termales.
El Chavo: Yo también quería ir a las aguas termales para quitarme el frío de mi cuerpo.
Quico: Y yo quería hacer un concurso de nado con el Chavo.
Megumin: En fin, no podemos hacer nada al respecto. Mejor sigamos haciendo misiones para ganar dinero y poder pagar las aguas termales cuando vuelvan a estar disponibles.
Don Ramón: Eso suena como una buena idea, además, podríamos aprovechar para mejorar nuestras habilidades y equipos.
El Chavo: ¡Sí! Y también podríamos comer muchas tortas de Sapo.
Todos se rieron ante la ocurrencia del Chavo y comenzaron a planear sus próximas misiones y gastos.
Arcanretia
Don Ramon, El Chavo y Quico estaban sentados en la sala leyendo el periódico cuando se encontraron con la noticia de que las aguas termales de Arcanretia habían sido reabiertas después de dos meses de cierre debido a la contaminación.
"¡Vamos a ir a disfrutar de las aguas termales! ¡Es la oportunidad perfecta para tomarnos unas vacaciones!", exclamó Don Ramon emocionado.
"Sí, ¡sería genial ir a relajarnos y pasar un buen rato!", añadió El Chavo.
Pero al escuchar la idea, Megumin parecía incómoda y se inventouna excusa para no ir.
"Lo siento chicos, pero no creo que pueda ir. Tengo que preparar algunos hechizos nuevos", dijo Megumin.
Los tres amigos se miraron confundidos y sospechosos, pero decidieron no preguntar más. En lugar de eso, se pusieron en marcha para planificar su viaje a las aguas termales de Arcanretia. Mientras tanto, Megumin seguía evadiendo el tema con diferentes excusas cada vez que surgía.
Don Ramon entra a la tienda de Wiz emocionado, saltando de alegría y con una sonrisa de oreja a oreja.
Don Ramon: ¡Hola Wiz! ¿Cómo estás? Vengo a comprarte algunas cosas para nuestras vacaciones en Arcanretia.
Wiz: ¡Hola Don Ramon! Me alegra saber que vas a ir de vacaciones. ¿Qué necesitas?
Don Ramon: Todo lo que sea necesario para unas vacaciones inolvidables en la playa. Ya sabes, traje de baño, sombrero, protector solar, lentes de sol, una buena botella de tequila...
Wiz: Oh, Don Ramon, Arcanretia es una ciudad termal, no una ciudad playera.
Don Ramon: ¿Cómo? ¿Entonces no hay playa?
Wiz: No, no hay playa. Pero hay aguas termales que son muy relajantes y curativas. Además, hay muchos spas y baños públicos.
Don Ramon: (un poco desilusionado) Bueno, eso también suena bien. ¿Y hay un ambiente de fiesta?
Wiz: No exactamente. Es un lugar muy tranquilo y pacífico, ideal para relajarse y meditar.
Don Ramon: (cada vez más decepcionado) ¿Y la comida? ¿Es buena?
Wiz: Bueno, en Arcanretia se especializan en alimentos saludables y orgánicos. No hay muchos platillos picantes, pero la comida es deliciosa y nutritiva.
Don Ramon: (totalmente desanimado) Vaya, esto no suena como Acapulco en absoluto.
Wiz: Lo siento, Don Ramon. Pero seguro que disfrutarás de las aguas termales y de la tranquilidad de Arcanretia. Además, podrás disfrutar de mi hospitalidad y de los dulces que preparo con tanto amor.
Don Ramon: (sonriendo) Bueno, eso suena bien. Siempre es agradable estar en tu compañía, Wiz. Gracias por tu ayuda.
Don Ramon sale de la tienda de Wiz con una sonrisa en el rostro, aunque aún un poco decepcionado de que no haya playa en Arcanretia.
Mientras El Chavo, Quico y Don Ramon viajaban en su caravana hacia Arcanretia, Wiz se acordó de algo muy importante que olvidó mencionarles.
Wiz: (hablando sola) Oh no, ¿cómo pude olvidarlo? ¡Arcanretia está habitada por los seguidores de Axis! Son unos fanáticos religiosos locos por Aqua.
De repente, se le ocurre una idea para avisarles a los chicos.
Wiz: ¡Ya sé! Voy a mandarle un mensaje a Megumin para que les avise.
Wiz rápidamente abre su libro de hechizos y comienza a escribir un mensaje.
Wiz: (leyendo en voz alta) "Megumin, necesito que le avises a El Chavo, Quico y Don Ramon que Arcanretia está habitada por los seguidores de Axis. Son unos fanáticos religiosos locos por Aqua. ¡Diles que tengan cuidado!"
Después de terminar el mensaje, Wiz lo envía a Megumin. Unos minutos después, Megumin recibe el mensaje pero lo ignora.
El Chavo, Quico y Don Ramon continúan su camino hacia Arcanretia, aún sin saber lo que les espera.
Mientras El Chavo, Quico y Don Ramon viajaban en su caravana hacia Arcanretia, Wiz se acordó de algo muy importante que olvidó mencionarles.
El Chavo, Quico y Don Ramon continúan su camino hacia Arcanretia, aún sin saber lo que les espera.
Don Ramon, el Chavo y Quico llegaron emocionados a las aguas termales de Arcanretia después de su aventura en la ciudad. Al acercarse a las aguas, notaron que no había mucha gente allí, solo un par de personas flotando en el agua. El Chavo se desvistió rápidamente y se lanzó al agua, mientras Don Ramon y Quico observaban.
De repente, el Chavo comenzó a gritar y a agitarse. Don Ramon y Quico corrieron hacia él para ver qué estaba pasando. Resultó que el agua estaba demasiado caliente, ¡y el Chavo no podía soportarlo!
Don Ramon y Quico rápidamente sacaron al Chavo del agua y lo envolvieron en toallas. Mientras se recuperaba del shock, Don Ramon y Quico decidieron probar el agua para ver si era realmente tan caliente como el Chavo lo había descrito.
Se acercaron al borde del agua y se mojaron los pies. De repente, sus caras se retorcieron de dolor. ¡El agua estaba hirviendo! Rápidamente sacaron sus pies del agua y se unieron al Chavo en las toallas, todos empapados en sudor y en dolor.
Don Ramon se lamentó de no haber leído la letra pequeña en el periódico sobre el problema de las aguas termales. Sin embargo, no dejaron que este pequeño percance arruinara su viaje a Arcanretia. Se vistieron rápidamente y se dirigieron al centro de la ciudad para disfrutar de los demás atractivos turísticos.
Después de haber disfrutado de la piscina del hotel, Don Ramón, El Chavo y Quico deciden probar las aguas termales de Arcanretia antes de regresar a su ciudad natal. Al llegar, se sorprenden al ver que la gente que entra en las aguas termales está completamente desnuda, solo cubierta por una pequeña toalla.
Don Ramón, El Chavo y Quico se miran entre sí, atónitos. "¿Cómo pueden entrar así?", pregunta Don Ramón en voz baja. "¡Esto es una locura!", exclama Quico. El Chavo se encoge de hombros, "Así es como lo hacen aquí", dice.
A pesar de la incomodidad inicial, finalmente se deciden a intentarlo. Con la toalla cubriendo solo lo esencial, se sumergen en el agua caliente. Al principio, se sienten un poco incómodos, pero después de un rato, se relajan y empiezan a disfrutar del baño.
"Esto es como una sopa de cebolla gigante", dice Don Ramón. "¿Qué es una sopa de cebolla?", pregunta El Chavo. "Es una sopa caliente que se come en México", responde Don Ramón.
Quico se ríe y comenta: "Bueno, lo importante es que estamos disfrutando de las aguas termales, ¿verdad?". Los tres asienten y continúan disfrutando del baño.
Más tarde, mientras se cambian de ropa, se dan cuenta de que no se habían sentido tan libres y relajados en mucho tiempo. "Esto ha sido como un regalo para nuestros cuerpos", dice Don Ramón, sonriendo.
El Chavo y Quico están de acuerdo y prometen volver a visitar las aguas termales en su próximo viaje a Arcanretia, aunque quizás se compren una toalla un poco más grande la próxima vez.
Don Ramon, El Chavo y Quico disfrutaban de las aguas termales de Arcanretia, pero mientras estaban relajándose, una pequeña discusión surgió entre los dos niños.
"Quico, deja de salpicarme," se quejó El Chavo.
"Yo no te estoy salpicando," respondió Quico.
"Sí lo estás haciendo, y además estás ocupando todo el espacio," replicó El Chavo.
"Yo no estoy ocupando todo el espacio, tú eres el que estás invadiendo mi espacio," dijo Quico.
En ese momento, El Chavo tuvo una idea para molestar a su amigo. De repente, se acercó a Quico y le quitó la toalla que lo cubría.
"¡Oye, devuélveme mi toalla!" gritó Quico, tratando de cubrirse.
"¿Qué pasa, chico? ¿Tienes frío?" preguntó El Chavo, riéndose.
Don Ramon, que estaba sentado en la orilla de la piscina, se dio cuenta de lo que estaba sucediendo y trató de detener la pelea.
"Niños, por favor, dejen de pelear. ¡Estamos aquí para relajarnos, no para pelear!" dijo Don Ramon.
Pero la pelea entre El Chavo y Quico continuó, y finalmente Don Ramon tuvo que intervenir y separarlos. Después de la pelea, los tres se rieron juntos de lo ocurrido y prometieron disfrutar el resto de su viaje sin pelear.
Después de un largo día de disfrutar de las aguas termales, Don Ramon, El Chavo y Quico deciden ir a un restaurante para cenar. El lugar estaba lleno de gente, así que los chicos tuvieron que esperar un poco antes de conseguir una mesa.
Finalmente, el camarero los llevó a una mesa grande y hermosa llena de comida deliciosa. Don Ramon comenzó a llenar su plato de todo tipo de manjares, mientras El Chavo y Quico miraban con hambre.
Pero cuando El Chavo intentó tomar un pedazo d, su mano se resbaló y golpeó accidentalmente su plato, lo que provocó que toda la mesa se tambaleara y la comida cayera al suelo.
"¡Oh no! Lo siento mucho, lo siento mucho", se disculpó El Chavo mientras trataba de levantar la comida del suelo.
Los demás comensales los miraban con sorpresa y disgusto, y el camarero estaba claramente molesto. Pero Don Ramon, tratando de aliviar la situación, decidió ofrecer pagar por la comida.
"Lo siento mucho, lo siento mucho", repetía El Chavo mientras intentaba limpiar el desastre.
Quico, mientras tanto, se acurrucó en su asiento, completamente avergonzado. Finalmente, Don Ramon pagó la cuenta y los tres salieron del restaurante con la cabeza baja, seguidos por las miradas de desaprobación de los demás comensales.
Después de pasar unos días en Arcanretia, el grupo conformado por Don Ramón, El Chavo y Quico deciden volver a casa. Los fanaticos religiosos no paraban de acosarlos en cada lugar ue iban.
Cuando Los chicos finalmente habian llegado a Arcanretia, después de un largo viaje en la caravana alquilada. Don Ramon, El Chavo y Quico estaban impresionados por la belleza de la ciudad, pensando que era un paraíso turístico como Acapulco.
Cuando llegaron al centro de la ciudad, vieron a un grupo de personas vestidas con túnicas blancas y pelucas azules que estaban predicando sobre la diosa Aqua en una plaza pública. Los chicos se acercaron a ellos, emocionados de conocer a los locales, pero rápidamente se dieron cuenta de que algo andaba mal.
Los seguidores de Axis no eran solo un grupo religioso pacífico, eran fanáticos extremistas. Megumin estaba en lo correcto al estar nerviosas. Los seguidores comenzaron a rodear a los chicos y a empujarlos hacia el altar en la plaza. Don Ramon intentó negociar con los seguidores para que los dejaran ir, pero ellos se negaron. Por eso se fueron antes
Se despiden del dueño de la caravana, quien les devuelve la fianza completa después de haber devuelto el vehículo en buenas condiciones.
"Mira, Chavito, esta vez no se rompió nada", dice Don Ramón al subirse al la caravana que alquilaron para regresar a casa.
"Sí, pero no nos llevamos ningún recuerdo", responde El Chavo con cierta tristeza.
"No te preocupes, amigo. Tendremos muchos otros viajes para tener recuerdos", responde Don Ramón con una sonrisa.
"¡Sí, y la próxima vez no me dejas solo en el baño!", interviene Quico en tono de broma.
Los tres se ríen mientras se acomodan en el auto para iniciar el viaje de regreso a casa. A pesar de las situaciones cómicas y los momentos incómodos que pasaron en Arcanretia, se divirtieron y disfrutaron de una aventura juntos. Y eso es lo que importa al final del día.
Los chicos regresaron a su hogar, llenos de emoción por su aventura en Arcanretia. Al entrar por la puerta, se encontraron con Megumin y Yunyun, quienes también habían regresado de un viaje.
"¡Hola, chicos! ¿Cómo estuvo su viaje a Arcanretia?" preguntó Megumin con entusiasmo.
"Fue increíble, Megumin. Tienes que ir la próxima vez", respondió Quico emocionado.
"Pero ya sabes cómo es, nunca deja su entrenamiento de explosiones", agregó Don Ramón.
"Ah, sí. Siempre estoy ocupada mejorando mis habilidades. Pero ¿adivinen qué? ¡Yo y mi rival auto proclamada Rival Yunyun Fuimos a la aldea de los magos carmesí con Yunyun!" exclamó Megumin con una sonrisa en su rostro.
El grupo se presentaria ante Yunyuny y viseversa
"¿La aldea de los magos carmesí?" preguntó El Chavo, interesado.
"Sí, es mi aldea natal. Fue maravilloso volver allí después de tanto tiempo. Pero lo más sorprendente es que el Chapulín Colorado estaba allí y venció al general del rey demonio Silvia, la quimera, en un duelo de cerveza", explicó Megumin con asombro.
"¡No me digas! ¡Eso suena increíble!" exclamó Don Ramón.
"Pero claro, si el Chapulín Colorado es el héroe más grande de todos los tiempos", agregó El Chavo.
Todos estaban emocionados por la historia de Megumin y la victoria del Chapulín Colorado. Parecía que siempre había aventuras por vivir, incluso en el hogar de estos amigos tan divertidos.
En la capitual
La escena comienza con Megumin, entusiasmada, hablando con Wiz sobre la invitación que recibió para la fiesta en el castillo de la princesa Iris.
Megumin: ¡Wiz, no lo puedo creer! ¡He sido invitada a la fiesta en el castillo de la princesa Iris!
Wiz: ¡Oh, eso es maravilloso, Megumin! ¡Te lo mereces después de todo lo que has hecho por el Reino!
Don Ramón, que estaba escuchando la conversación, se acerca a Megumin.
Don Ramón: Oye, Megumin, ¿y nosotros? ¿No nos invitaron?
Megumin: Lo siento, Don Ramón, pero esta es una fiesta exclusiva para los héroes que ayudaron en la batalla contra la fortaleza destroyer.
El Chavo y Quico se unen a la conversación.
El Chavo: Pero Megumin, nosotros también ayudamos.
Quico: Sí, le empujamos la cuidad como dijo eal chapulín.
Megumin: Lo siento chicos, pero eso no fue suficiente para ser invitados a la fiesta de la princesa.
Don Ramón: (frustrado) oh y ahora quien podra defendernos...
En ese momento, aparece el chapulín colorado.
Chapulín: ¿Qué pasa, amigos? ¿Por qué esa cara larga?
Megumin: Chapulín, estoy muy emocionada porque fui invitada a la fiesta de la princesa Iris, pero Don Ramón, El Chavo y Quico no fueron invitados.
Chapulín: Oh, no se preocupen amigos, yo tengo un plan infalible.
El Chavo: ¿Un plan, chapulín? ¿Para qué?
Chapulín: Para entrar a la fiesta de la princesa, por supuesto. ¿Qué les parece si nos disfrazamos de músicos y nos colamos en la fiesta?
Don Ramón, El Chavo y Quico se emocionan ante la idea.
Don Ramón: ¡Eso suena genial, chapulín! ¡Será una aventura!
Megumin: (riendo) ¡Qué locura! Me encanta, ¡vamos a hacerlo!
Y así, Don Ramón, El Chavo, Quico y el Chapulín colorado se preparan para colarse en la fiesta de la princesa Iris, con la ayuda de Megumin, Wiz les presta algunos instrumentos y les da algunos consejos sobre cómo comportarse en una fiesta real. La aventura promete ser emocionante y llena de diversión para todos.
El chapulin le mensiona a el chavo que su cara parece habera visto en otra parte
El chavo responde que imposibe por que su cara siempre la ha tenido en su cabeza
La fiesta en el palacio real del Reino de Axel estaba en pleno apogeo. Megumin había sido invitada debido a sus hazañas pasadas y había llegado temprano para poder disfrutar de la música y el baile. Alrededor de ella, los invitados estaban vestidos con sus mejores atuendos, charlando y riendo mientras disfrutaban del banquete.
De repente, un grito alarmante interrumpió la música y el baile. El ambiente festivo se volvió tenso cuando varios subordinados del rey demonio irrumpieron en la cuidad. Gritando y blandiendo sus armas, los mercenarios comenzaron a atacar a los invitados.
Don Ramón, el Chavo y Quico estaban en la periferia de la sala y se encontraron rápidamente rodeados por los mercenarios. Don Ramón intentó escapar, pero uno de los mercenarios lo agarró por detrás.
"¡Suelta a mi papá!" gritó el Chavo, corriendo hacia los mercenarios con el chipote chillon en sus manos.
Quico también intentó ayudar con su chicharra, pero fue rápidamente desarmado y derrotado.
El chapulin los ayudaria, la situacion fue controlada por los demas heroes invitados a la fiesta
La princesa Iris también tomó una espada y se unió a la lucha. Con la ayuda de los héroes, los mercenarios finalmente fueron derrotados y expulsados de la sala.
Después de la batalla, los invitados estaban conmocionados y algunos heridos. Darkness se acercó a Don Ramón, el Chavo y Quico para asegurarse de que estuvieran bien. Sorprendiendose ambos de que esten ahi
"Gracias por su ayuda", dijo Don Ramón con gratitud, todavía un poco aturdido por la experiencia.
"No hay problema", respondió Darkness, sonriendo. "Esto es lo que hacemos los aventureros. Ahora, ¿por qué no volvemos a la fiesta y disfrutamos de una buena comida?"
Los cuatro se dirigieron a la mesa de banquetes, donde se unieron a Megumin y al resto de los invitados. A pesar del ataque, la fiesta continuó con más fuerza que nunca, con todos los invitados agradecidos por haber escapado con vida.
El chapulin colorado estaba disfrutando de la fiesta disfrazado junto a los demás aventureros y Megumin cuando de repente, sintió que alguien lo estaba llamando. Se alejó un poco de la multitud y se topó con Chris,.
"Chapulin, necesito tu ayuda. Tengo que recuperar un collar que está en el castillo de la princesa", dijo Chris en un tono urgente.
El Chapulin se sorprendió por la solicitud, pero no dudó en ofrecer su ayuda. "¡Por supuesto, Chris! ¡Cuenta conmigo! Pero, ¿por qué necesitas ese collar?".
Chris bajó su voz y susurró: "Es un asunto delicado, pero es importante para la seguridad del Reino. Además, tengo mis propias razones personales para recuperarlo".
La boda
Infiltranose en el castillo, Chris roba el collar de Iris
De vuelta en la fiesta, Chris agradeció al Chapulin por su ayuda y le prometió que le pagaría por su trabajo. Mientras tanto, el Chapulin se unió nuevamente a la fiesta con los demás héroes y celebraron su victoria.
después del robo, todos los presentes en la fiesta estaban atónitos. Darkness y Megumin decidieron unirse para encontrar al ladrón y recuperar el collar robado. Mientras tanto, el chapulín se estaba disfrazando de ladrón para tratar de infiltrarse y ayudar en la búsqueda.
tiempo despues
Don Ramon, El Chavo, y Quico se encontraban en la mansion de Wiz, descansando después de un día de trabajo duro. De repente, escucharon un fuerte rugido en la calle y salieron para ver qué sucedía.
Al salir, encontraron a Darkness y Wiz llevando a una hidra gigante . Los chicos se sorprendieron al ver a la bestia sometida y enojada, y preguntaron qué estaba sucediendo.
habían estado en una misión para capturar la hidra
.
Mientras tanto, Megumin y Yunyun se unieron a la caza de la hidra, llegando al lugar justo a tiempo para ver a la criatura sometida. Viendo su oportunidad, cada una cortó una de las cabezas de la hidra.
Darkness, Wiz, Megumin, y Yunyun comenzaron a discutir quién debería reclamar la recompensa por capturar la hidra y cortar sus cabezas. Los chicos, por su parte, simplemente se quedaron mirando sin entender nada.
Al final, la discusión terminó en un empate, y todos decidieron compartir la recompensa de manera justa. Los chicos solo pudieron suspirar, preguntándose cómo habían terminado involucrados en algo tan loco.
Don Ramon se encontraba en el gremio, leyendo un periódico cuando de repente ve entrar a Valdar, el hijo del feudal, con una expresión despechada en el rostro.
Don Ramon: ¡Hola Señor Valdar! ¿Qué te trae por aquí?
Valdar: (Borracho) Estoy enamorado de Darkness, pero ella y su amiga Chris están difamando a mi padre.
Don Ramon: ¿Difamando a tu padre? ¿Qué están diciendo?
Valdar: Que es un corrupto, pero yo sé que eso no es cierto.
Don Ramon: Hmm, entiendo. ¿Has intentado hablar con tu padre sobre esto?
Valdar: Sí, pero él se niega a escucharme. Necesito encontrar pruebas de que está diciendo la verdad.
Don Ramon: Bueno, eso no será fácil, pero si realmente quieres descubrir la verdad, deberías investigar por tu cuenta. Pero ten cuidado, no querrás meterte en problemas.
Valdar: Gracias por el consejo, . Lo tendré en cuenta.
Al día siguiente, Valdar llegó al gremio con una expresión triunfante en el rostro.
Valdar: ¡Don Ramon! ¡Lo hice! ¡Descubrí que mi padre es un asesino!
Don Ramon: ¿Un asesino?
Valdar: Sí, he encontrado la habitación donde guarda los tesoros que ha robado a los aventureros que ha matado.
En ese momento, el Chapulín Colorado y Chris entraron en el gremio.
Chapulín Colorado: ¡Don Ramon! ¡Chris y yo nos metimos en la casa del feudal para recuperar nuestras armas que nos habían robado unos mercenarios! ¡Pero nos hemos topado con este chico que ha descubierto la verdad!
Chris: ¡Valdar, no sabes lo que has hecho! ¡Tu padre es peligroso! ¡Tenemos que irnos de aquí!
Valdar: ¿Qué está pasando aquí?
Don Ramon: ¡Es una larga historia, Valdar! Pero creo que deberíamos irnos antes de que el feudal se entere de que has descubierto la verdad.
Todos salieron corriendo del gremio y se alejaron del pueblo, pero Valdar estaba muy emocionado por haber descubierto la verdad sobre su padre.
Valdar: ¡No puedo creer que mi padre haya sido capaz de hacer algo así! ¡Pero gracias a ustedes, ahora sé la verdad!
Chapulín Colorado: No hay de qué, mi amigo. Siempre es un placer ayudar a los que lo necesitan.
Valdar seguía procesando la impactante verdad sobre su padre.
Valdar se enfrenta a su padre, decidido a ponerle fin a sus acciones corruptas. Pero antes de que pudiera hacer algo, el feudal saca una caja mágica y la abre, liberando una extraña niebla que lo rodea a él y a Valdar.
De repente, una figura oscura aparece en medio de la niebla: era Max, el demonio invocado por el feudal. Max comienza a hablar con voz profunda y siniestra, mientras Valdar parece estar hipnotizado por él.
Don Ramon, El Chavo y Quico, que habían seguido a Valdar hasta allí, observan la escena con horror desde detrás de una puerta entreabierta. No saben qué hacer, pero saben que deben ayudar a su amigo.
En ese momento, Max se da cuenta de la presencia de los tres amigos detrás de la puerta y se dirige hacia ellos con una sonrisa malvada. Pero justo cuando Max estaba a punto de atraparlos, El Chapulín Colorado y Chris aparecen de la nada y se enfrentan a Max.
Mientras tanto, Valdar comienza a recuperarse de la hipnosis y se da cuenta de la situación. Decide unirse a la lucha contra Max junto a Don Ramon, El Chavo, Quico, El Chapulín Colorado y Chris.
Todos trabajan juntos para vencer al demonio Max y logran derrotarlo con una gran estrategia en equipo. Una vez que Max es vencido, Valdar se da cuenta de lo equivocado que estaba en cuanto a su padre y se reconcilia con él. Todos celebran su victoria juntos y Don Ramon, El Chavo y Quico se sienten orgullosos de haber ayudado a salvar el día.
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